Tarancón clausuró el jueves sus fiestas en honor a la Virgen de Riansares por todo lo alto, con una jornada en la que destacaron actividades como el desfile de vehículos clásicos y de animación infantil, como una original “estampida salvaje”, un espectáculo y el tradicional desfile de disfraces.
Las fiestas concluyeron ya de noche con los últimos torillos de fuego y una estruendosa traca final.