Los Reyes Magos, eje central de la zambomba navideña de Sakamargo en Tarancón
En el año 2020, a raíz de la pandemia, la escuela de flamenco y danza española Sakamargo de Tarancón no encontraba ningún teatro o espacio cerrado para hacer su tradicional espectáculo de Navidad. En ese momento, Rocío Camacho, su directora, decidió hacer algo en la calle, y surgió la zambomba. Se llevó a cabo en la plaza del Ayuntamiento, y aunque se hizo con las diferentes restricciones que marcaban entonces las autoridades sanitarias, quedó un espectáculo “muy bonito”.
“Para nada” se esperaban esa respuesta del público taranconero, y es que, el objetivo que se marcaron en todo momento con la zambomba fue recrear cómo los vecinos de Jerez celebran la Navidad bailando y cantando villancicos en estilo flamenco. En 2021 decidieron volver, y ahora, esta ya se ha convertido en una de las actividades que año tras año se incluyen en el programa navideño de Tarancón.
En la zambomba de este año, según explica Camacho, van a participar en torno a 60 alumnas y alumnos de todas las edades de los diferentes grupos de la escuela, tanto de baile como de canto, y los Reyes Magos será la temática en torno a la cual girará el espectáculo. Por eso, no faltarán los villancicos que hacen referencia a Sus Majestades de Oriente, así como otros más tradicionales de esta fecha.
Este año, la cita será el domingo 29 de diciembre después del belén viviente, a las 19:30 horas aproximadamente, en la plaza del Ayuntamiento. Además, tendrán tintes benéficos, ya que la actuación se ha englobado dentro del festival ‘Navidad Solidaria’ del Consistorio de Tarancón. Mientras dure la actuación habrá una chocolatada solidaria y colchonetas para los más pequeños, y el dinero recaudado se donará a los vecinos afectados por la DANA de finales de octubre.
Dado el éxito que han ido cosechando en Tarancón los últimos años, la academia también lleva su zambomba a otras localidades tanto de la comarca de Tarancón como de localidades de la provincia de Madrid, puesto que Sakamargo tiene otra sede en Estremera. “Hay días que pasamos mucho frío, otros que no tanto, pero es muy bonito porque a la gente le gusta mucho”, asegura Camacho.
En Tarancón, cada año suelen congregar a unas 200 personas de forma aproximada, todo un éxito tal y como asegura Rocío Camacho que, además, sirve para motivar a sus alumnas porque, el salir a la calle y que la gente vea cómo evoluciona su nivel artístico, siempre es positivo.
