La Parroquia Mayor Nuestra Señora de la Asunción de Tarancón se llenó de fieles para conocer de primera mano la nueva talla del Cristo de Burgos, que fue bendecida solemnemente tras la eucaristía.
La imagen, perteneciente a la Hermandad de la Exaltación de la Cruz y Dulce Nombre de María, procesionará ya este Viernes Santo por las calles de la localidad.
La nueva talla, realizada por el joven imaginero sevillano Juan Bautista Jiménez, “es el resumen de diez años de formación y trabajo” y según destacaba el autor durante la presentación goza de una "gran contemporaneidad".
En la imagen se contempla a Cristo muerto en la cruz con un acusado descolgamiento, lo que se aprecia en la posición de las manos, con las muñecas muy torsionadas, los brazos muy tensos, mientras que las piernas se flexionan adelantando el tronco.
Esta manera de descolgarse hace que la espalda de Jesús apoye en el madero entre los omoplatos. El paño que cubre las caderas es muy movido, como si se hubiera desanudado, y va pintado en color rojo, símbolo de la Pasión, lo que reviste a Cristo como sacerdote de su propio sacrificio en la cruz, además de que también es el color de la Exaltación.
"Una anatomía rica en matices, un rostro bellísimo y una policromía tremendamente realista hace de esta escultura una verdadera obra de arte que se incorpora desde este año a la Semana Santa de Tarancón y a la veneración de los fieles de la Parroquia Mayor de la Asunción", señalam desde la Hermandad.
UN NUEVO NIDO DE PLATA
La nueva imagen estrenará también un nuevo aderezo de orfebrería, un nido de plata con tres huevos de alabastro, símbolo de esta advocación del Crucificado por la leyenda que hace alusión al nido de gaviota que tenía la cruz de Cristo cuando fue encontrado flotando sobre las olas por un mercader burgalés, según indicó el párroco, Miguel Alberto López, durante la eucaristía. El nido ha sido realizado por el orfebre Jesús María Cosano, de Puente Genil (Córdoba), y lleva entrelazadas doce hojas de hiedra, símbolo de la Resurrección.
Los cofrades participaron activamente con lecturas, peticiones y ofrendas en este acto de presentación de la nueva imagen en el que el acompañamiento musical corrió a cargo del coro de la capilla de El Salvador de la capital conquense, que dirige el taranconero Rafael Díaz Valencia, que para la ocasión elegió un repertorio de música barroca, clásica y canto gregoriano.
El acto contó la asistencia del alcalde de la localidad, Jose López Carrizo, la diputada nacional María Jesús Bonilla y varios concejales tanto del equipo de gobierno, con el de Cultura a la cabeza, Raúl Añover, como del grupo popular, junto a directivos de la cofradía, con la presidenta Carmen Mahillo al frente.