El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha y las Asociaciones para la Lucha contra las Enfermedades Renales (ALCER) de Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara y Toledo han suscrito recientemente un convenio de colaboración dirigido a seguir mejorando la calidad del transporte sanitario de los pacientes en diálisis.
Las especiales circunstancias y características que configuran la atención sanitaria del colectivo de enfermos con insuficiencia renal crónica -alta frecuentación de sesiones de tratamiento de diálisis, larga duración de los mismos, efectos secundarios, tratamiento de por vida y pacientes con pluripatología-, hacen que para el SESCAM resulte prioritario facilitar y favorecer los desplazamientos y los tratamientos de estos pacientes en las mejores condiciones posibles.
Uno de los pilares fundamentales de la política sanitaria en Castilla-La Mancha es el Plan de Humanización, donde se hace referencia, entre otras cosas, al abordaje integral de la persona enferma, teniendo en cuenta las dimensiones biológica, psicológica, social y conductual.
Desde esta perspectiva, se considera imprescindible otorgar la misma importancia tanto a las necesidades clínicas como a las sociales, emocionales y psicológicas, y esto significa involucrar a las personas atendidas y a sus familias en los procesos asistenciales, en este caso a través de ALCER.
Esta asociación participa y se implica activamente en todos aquellos aspectos que afectan a la calidad asistencial y, por lo tanto, a la calidad de vida de sus asociados, tanto en lo referido a necesidades en los traslados hasta el centro de tratamiento como en actividades dirigidas a apoyo social, psicológico, apoyo en los procesos de donación y trasplantes renales, actuaciones formativas e informativas, etc.
En este contexto, uno de los principales objetivos tanto del SESCAM como de la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario, es mejorar el servicio de transporte sanitario, incluyendo la humanización como una de sus prioridades.
A este respecto, dentro de las medidas a llevar a cabo se ha establecido como prioritaria la actuación sobre la calidad de la organización, operativa y traslados de los enfermos sometidos a tratamiento de diálisis.
La atención prestada por el SESCAM a la problemática de los enfermos renales en nuestra región, en sus diversas y complejas manifestaciones, encuentra una adecuada correlación en las actividades que desarrolla ALCER, de tal manera que se ha mejorado y firmado un nuevo acuerdo con el objetivo de facilitar a este colectivo el acceso a los servicios y actuaciones sanitarias indicadas para su tratamiento, adecuando y organizando los traslados y desplazamientos efectuados en ambulancia por estos pacientes.
Este convenio, que estará vigente hasta 2027 y contempla una aportación del SESCAM de 544.000 euros durante los cuatro años de duración, ha sido firmado por el director gerente del SESCAM, Alberto Jara Sánchez, y los representantes de las cuatro asociaciones ALCER de la región. Al acto también ha asistido el director de la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario, Alberto López Ballesteros.
Experiencia piloto
En los últimos meses, la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario ha llevado a cabo un pilotaje de un plan específico para el transporte de pacientes de diálisis en la provincia de Ciudad Real con el objetivo de establecer rutas específicas con ambulancias dedicadas de forma exclusiva a ello, siempre que sea posible, para optimizar la gestión del transporte de estos pacientes y de los tiempos dedicados al mismo.
Este pilotaje ha supuesto la resolución de más del 85 por ciento de las incidencias relacionadas con el transporte sanitario de pacientes de diálisis en dicha provincia en los últimos 9 meses.
Este plan hace especial énfasis en la operativa del traslado, a través de las empresas concesionarias de transporte sanitario, involucrándolas en dicho proyecto y planteando el objetivo de reducir la duración de los mismos, limitar su distancia, optimizando las rutas y desplazamientos y realizar los tratamientos en las franjas horarias más adecuadas para el paciente, teniendo en cuenta la organización interna y externa.