La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha aprobado la normativa que impulsa la actividad económica en zonas rurales a través de la modificación de la instrucción técnica de planeamiento (ITP) que incorporará, principalmente, los objetivos de la Agenda 2030 de desarrollo sostenible.
Se trata de una modificación de la normativa en relación a los requisitos que deben de cumplir las obras, construcciones e instalaciones en suelo rústico, que ha sido firmada este viernes por el consejero de Fomento, Nacho Hernando, ha informado en una nota de prensa este departamento del Gobierno regional.
Hernando ha destacado que este cambio posibilita "una muy mayor capacidad a la hora de poner en marcha empresas en el suelo rústico de la región" y ha recalcado que lo que está haciendo el Ejecutivo autonómico con esta nueva ITP "es apostar decididamente por la generación de puestos de trabajo y el crecimiento económico de los pueblos".
La nueva ITP contempla el incremento del porcentaje de superficie ocupada por la edificación para determinados usos productivos sin incluir el residencial, por lo que se determina un aumento de hasta el 20 por ciento de superficie máxima ocupada para edificación del sector primario y un aumento de edificación para uso industrial del 20 por ciento, en este último caso cuando el suelo no esté protegido.
Fomento, ha explicado que este aumento supone en ambos casos, duplicar esta superficie máxima ocupada, al pasar del 10 por ciento actual al 20 y además, contempla un incremento de la ocupación de tiendas de artesanía o de productos agrícolas y de las instalaciones de los cámpines de hasta el 10 por ciento de la superficie, así como hasta un 20 por ciento cuando se trate de establecimientos de turismo rural.
Asimismo, la normativa recoge la disminución de la parcela mínima en el supuesto de usos y actividades vinculados al sector primario que se desarrollen en parcelas de regadío para facilitar la implantación de pequeñas explotaciones y el fomento de la utilización de los recursos naturales agrícolas y ganaderos.
La modificación también incorpora nuevos conceptos de actividades, entre los que se encuentran los puntos de recarga de energía eléctrica u otras instalaciones similares, como pueden ser la gasineras, a las que equipara, en cuanto al régimen aplicable, a las tradicionales gasolineras