El Gobierno de Castilla-La Mancha ha abonado ya más de 11 millones de euros en pagos por la campaña de reestructuración y reconversión del viñedo, pagos de los cuales se han visto beneficiados más de un millar de agricultores de la región, todos aquellos que han finalizado los trabajos y han solicitado la certificación de los mismos.
El último pago se realizó, por parte del Ejecutivo regional, el viernes 27 de julio en las cuentas de concretamente de 75 viticultores de Castilla-La Mancha, con un total de 137 parcelas y 87 hectáreas, por un importe que supera los 869.000 euros.
Se trata de inversiones procedentes del programa de apoyo al sector del vino encaminadas a impulsar el sector para que cada vez sea más competitivo y en el que se han establecido una serie de criterios de priorización donde destacan los planes presentados por mujeres, proyectos de titularidad compartida, así como de aquellos viticultores que lleven su uva a bodegas que diferencien el pago de la uva en función de la calidad. También, a los jóvenes agricultores que pertenezcan a explotaciones prioritarias.
Hasta este momento, han recibido el abono en sus cuentas 1.046 agricultores de Castilla-La Mancha, con un total de 1.854 parcelas y 2.605 hectáreas.
Desde el Gobierno regional se recuerda a los agricultores la importancia de realizar las peticiones de las certificaciones de la superficie vitícola reestructurada para que se ejecute esta línea de ayudas.
Por provincias, Cuenca es la que mayor número de viticultores los beneficiados, con 773 hectáreas, más de 1.00 hectáreas y un pago global que supera los 4,2 millones de euros; seguida por la provincia de Albacete, con 244 agricultores, 376 parcelas con una superficie de 538 hectáreas y un importe que asciende a más de 2,3 millones de euros. En el caso de Toledo, el número de beneficiarios asciende ya a 226 viticultores, con 413 parcelas y 538 hectáreas, con ayudas que superan los 2,4 millones de euros y, en el caso de la provincia de Ciudad Real, han sido 167 beneficiarios, con 292 parcelas y 525 hectáreas en las que se ha intervenido, superándose los 2,2 millones de euros.
