Un equipo de investigación liderado por el paleontólogo conquense Fernando Blanco reabrirá las excavaciones en los yacimientos de Cerro Arenoso (Carrascosa del Campo) y Valquemado (Huete) durante las dos primeras semanas de septiembre. Allí, esperan encontrar restos de mamíferos con 30 millones de años de antigüedad, que podrían ser fundamentales para entender la evolución de los ecosistemas de nuestro planeta en un momento clave en el registro fósil.
El yacimiento de Cerro Arenoso, que data de hace 29-30 millones de años, corresponde al Oligoceno inferior, un periodo crucial para la evolución de las faunas de mamíferos terrestres. Descubierto en los años 60 durante la construcción del trasvase Tajo-Segura en Carrascosa del Campo.
Las excavaciones de entonces revelaron fósiles de especies transicionales entre las faunas antiguas y modernas, incluyendo la familia Dichobunidae, similares a los cerdos actuales, y los Gelocidae, que dieron lugar a rumiantes modernos como ciervos, bóvidos (incluidos bisontes y ñus) y jirafidos (representados hoy por jirafas y okapis). Las últimas excavaciones se realizaron en los años 90, y desde entonces el yacimiento ha permanecido inactivo.
Por su parte, el yacimiento de Valquemado, del Mioceno inferior (23 millones de años), completa la secuencia temporal de Cerro Arenoso, evidenciando el cambio en las faunas hacia grupos más modernos.
En este lugar se ha registrado la diversificación de artiodáctilos, como los antecesores de los jabalíes y antílopes, que superan en abundancia y diversidad a los perisodáctilos (incluidos caballos y rinocerontes), invirtiendo la tendencia de la era anterior y que se mantiene hasta nuestros días.
El Dr. Fernando Blanco, investigador de la Universidad de Gotemburgo, destaca la relevancia de estos yacimientos para comprender la evolución de los mamíferos actuales y futuros. “Comprender la evolución de las especies en el pasado nos ayudará a entender su estado actual y cómo evolucionarán en el futuro”, afirma.
Durante la campaña, los investigadores trabajarán de manera sistemática en el yacimiento para encontrar nuevos fósiles y contribuir a la colección del Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha. “El Oligoceno inferior es una época poco representada en la Península Ibérica. Tenemos la oportunidad única de trabajar y estudiar estas faunas en el excepcional yacimiento del Cerro Arenoso,” añade el Dr. Ignacio A. Lazagabaster, investigador del CENIEH y co-director de las excavaciones.
La excavación, que durará dos semanas, es el inicio de un proyecto más amplio en el que los investigadores pretenden continuar el estudio iniciado a finales de los años 60 con las excavaciones en el Cerro Arenoso. “Nuestra intención es conseguir financiación para estudiar toda la cuenca de Loranca en el futuro. Esta cuenca dispone de una serie de yacimientos ricos en fósiles que se extienden por más de 20 millones de años. Su estudio nos permitirá responder a grandes preguntas sobre la evolución de los mamíferos,” comenta el Dr. Blanco.
El proyecto también tiene una vertiente divulgativa. En colaboración con el Museo de Paleontología de Castilla-La Mancha y el apoyo del programa MICE 2024 de la Junta de Castilla-La Mancha las excavaciones, se organizarán charlas sobre paleontología en el centro cultural El Silo de Carrascosa del Campo, comenzando el 3 de septiembre. “Queremos acercar la paleontología tanto a los más jóvenes como al resto de la población”, explica el Dr. Ignacio A. Lazagabaster, co-director del proyecto.
Además del impacto científico, los investigadores subrayan el potencial económico. “El patrimonio paleontológico de la zona tiene un valor cultural incalculable y puede impulsar la economía local”, añadie Lazagabaster, destacando la importancia de futuros proyectos en la cuenca de Loranca, que alberga una rica secuencia de fósiles que abarca más de 20 millones de años.