Villar de Olalla se dispone a celebrar por todo lo alto sus fiestas patronales en honor de la Virgen del Villar, en las que el Ayuntamiento ha querido echar el resto después de dos años sin ellas. Y lo ha hecho con un intenso programa de actividades para todos los públicos, que en esta ocasión se prolonga durante, nada más y nada menos que once días; en concreto, del 1 al 11 de septiembre, aunque los días fuertes sean del 7 al 11, con la subida de la Patrona a la iglesia parroquial, donde permanecerá hasta el primer domingo de octubre que regresará a su ermita.
Y es que el Ayuntamiento ha afrontado la organización de estas fiestas con “mucha ilusión y ganas”, consciente de lo esperados que son estos festejos para los vecinos de la localidad, tal y como subraya el teniente de alcalde, José María Pastor. De ahí que se haya apostado por un programa “muy completo y, en especial, participativo”, según remarca, consultando a las asociaciones del municipio y a la Hermandad de la Patrona, entre otros, a la hora de confeccionar esta programación festiva.
Y es que, en palabras de Pastor, “con estos festejos lo que se pretende es que todo aquel que acuda estos días a Villar de Olalla a disfrutar de las fiestas se sienta como del pueblo y no un extraño, porque para nosotros es fundamental que los hijos del pueblo, que tuvieron que marcharse hace años, vengan estos días y se reencuentren con su vecinos”. No en vano, considera que “se han puesto todos los ingredientes para que la gente pueda disfrutar”.
Son muchas las actividades a destacar en estas once jornadas de fiesta, como son las distintas actuaciones previstas, que van desde música y magia hasta humor e ilusionismo.
Entre las novedades de este año, se encuentran desde un Urban Prix (día 9) hasta una macrodisco móvil (día 3), pasando por la degustación de gachas (día 3), cuyos ingredientes corren a cargo del Ayuntamiento. No obstante, Pastor resalta, asimismo, la cena de hermandad del día 11 con la carne donada por el matadero Frivall, que pone el broche a estas fiestas.
