‘Trebejos de antaño y otros cachivaches’, un recorrido por las tradiciones de Villar del Saz

En homenaje a los cientos de objetos que ha recolectado desde hace más de 20 años. Así entiende Félix Benita su nuevo libro titulado ‘Trebejos de antaño y otros cachivaches’, con la pretensión de que su personal museo pueda visitarse más allá de las instalaciones que tiene en Villar del Saz de Arcas, su pueblo natal.

“Este libro es un recorrido en papel por el museo”, asegura su fundador, que busca ampliar las fronteras de su colección para divulgarla no solo en la provincia de Cuenca sino también en cualquier punto de la geografía española, en especial en Manresa, ciudad en la que reside.

Este apasionado de la historia desea cumplir con su objetivo de dar a conocer aquellos elementos que marcaron la vida en los pueblos hace ya algunos años para que jóvenes y mayores puedan descubrir como vivían, trabajaban o qué utensilios usaban nuestros antepasados.

La colección incluye más de 800 piezas entre las que se encuentran instrumentos de labranza como hoces o trillos, junto a primeros elementos electrónicos que tienen una vida de más de cien años. Objetos que han sido restaurados por el propio Félix Benita lo que posibilita que “todos funcionen”.

Este nuevo inventario incluye 212 piezas, una por cada página, en la que se explica su uso, fecha de creación y lugar del hallazgo.

“Ya soy mayor y espero encontrar un sitio donde pueda exponerse todo lo que he comprado y recolectado desde hace más de 20 años y me gustaría que fuera en Cuenca capital”, expone Benita, quien está dispuesto a vender las piezas a alguna institución pública o particular para que pueda ser visitada y disfrutada por todos los turistas y visitantes que cada año llegan hasta la ciudad.

Este nuevo libro lo ha escrito durante el estado de alarma, aprovechando las horas de tranquilidad y recuperando su manejo con la maquina de escribir. Una obra que finalmente completó a su regreso a Villar del Saz de Arcas, donde realizó las fotografías que acompañan a cada página del tomo.

LIBRO DE RECUERDOS

Con el fin de atesorar y tener un archivo de todas las personas que han pasado por la colección, ha impreso también un ejemplar donde recoge todas las dedicatorias que han dejado plasmadas los visitantes a lo largo de los años.

Algo que guarda con especial cariño porque “han pasado personalidades importantes que han hecho grande esta exposición”. “Palabras de admiración hacia lo que llevo construyendo más de 20 años que reconfortan después de todo el trabajo”, destaca.

Un trabajo laborioso que espera sirva la pena para cumplir su mayor deseo: exhibir su recopilación en un espacio concurrido.