Torrejoncillo del Rey ha celebrado este fin de semana la III Ruta de las Calabazas, un concurso organizado por la Asociación Cultural “Alonso de Ojeda” que este año se ha adelantado a la festividad de Todos los Santos para fomentar la participación y la asistencia de público.
La colocación de calabazas en las ventanas cuenta con una larga tradición en Torrejoncillo, si bien se ponían la víspera del Día de los Difuntos, una más de las manifestaciones con que los torrejoncilleros se han enfrentado a la Noche de las Ánimas. Esa noche misteriosa y temerosa en la que, además, los vecinos se juntaban en las casas para comer puches, se tapaban las cerraduras de las puertas con los mismos puches o con cal para impedir la entrada de las ánimas en las casas, y los pequeños disfrutaban de los pirulíes, dulces elaborados con caramelo casero.
Aunque la celebración americana de Halloween ha interferido en la interpretación de esta noche a lo largo de todo el territorio nacional, en Torrejoncillo del Rey la Asociación Cultural “Alonso de Ojeda” ha querido incidir en aquello que más forma parte de nuestra tradición y cultura popular que es la elaboración y colocación de las calabazas.
En esta ocasión, han sido 27 las casas participantes en el concurso, con las que, previa inscripción, se ha conformado la ruta que trascurre por todo el pueblo. Aunque estas calabazas se podían visitar de manera individual, la mayoría de los torrejoncilleros se han congregaron en la plaza del pueblo para, juntos, divertirse mientras contemplaban cada una de ellas.
Una vez finalizado el recorrido todos los asistentes pudieron depositar su voto para elegir su calabaza favorita y la mejor decoración, las dos modalidades de premios con las que cuenta el concurso y que se otorgan mediante esa votación popular.
La noche finalizó con una particular ‘noche de brujas’ en la que se han elaboraron queimadas invitando a los espíritus con la que se convidó, junto con buñuelos, a todos los asistentes. También hubo bingo, para ayudar a sufragar los gastos.
Los niños también tuvieron su celebración, bien con “queimada” sin alcohol o bien con un Taller de Manualidades que se realizó por la mañana en la que elaboraron un juego de tres en raya, un pequeño búho y unos protectores para lápices.
Con todo ello, la Asociación Cultural “Alonso de Ojeda” contribuye a recuperar una de las tradiciones más queridas, además de impulsar una jornada de convivencia que cosecha una gran participación de los vecinos.