El Gobierno regional, con la colaboración de la Asociación Astrocuenca, ya tiene todo listo para disfrutar un año más de un Verano Astronómico, que, en esta ocasión, contempla doce observaciones en diez localizaciones desde el 10 de julio al 4 de septiembre. Una excelente oportunidad para disfrutar de las inmejorables condiciones de La Serranía conquense para la observación celeste no solo por su altitud, sino también por su baja contaminación lumínica y sus estándares de calidad para el desarrollo de este tipo de actividades, tal y como ha subrayado la delegada de la Junta en Cuenca, María Ángeles Martínez, durante la presentación de la edición de este año, junto al delegado provincial de Economía, Empresas y Empleo, Óscar Martínez; el director del Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha (MUPA) y del Museo de las Ciencias de Castilla-La Mancha, Santiago Langreo; y el presidente de la Asociación AstroCuenca, Joaquín Álvaro.
Este año el Verano Astronómico dará comienzo el 10 de julio en el MUPA y concluirá en el mismo sitio el 4 de septiembre, sin olvidar que este escenario albergará una tercera observación el 13 de agosto. El resto de citas serán el 16 de julio en Uña; el 17 de julio, en Las Majadas; el 31 de julio, en Tragacete; el 6 de agosto, en Mariana; el 7 de agosto, en Valdemeca; el 14 de agosto en Vega del Codorno; el 27 de agosto, en Sotos; el 28 de agosto, en Huélamo; y el 3 de septiembre, en Zarzuela.
Todas las observaciones se desarrollarán a las 23 horas, con una duración comprendida entre los 90 y los 120 minutos, y se llevarán a cabo con todas las medidas de seguridad sanitaria. Así, además de celebrarse en grupos reducidos, los asistentes estarán sentados, manteniendo la distancia de seguridad y disfrutando de la observación celeste en una pantalla gigante, en la que se proyectará lo que está recogiendo el telescopio.
Una modalidad ésta que, según ha explicado el presidente de AstroCuenca, ya se probó el pasado año y fue todo un éxito, siendo, incluso, merecedora de su publicación en varias revistas especializadas, puesto que cuenta con un matiz didáctico muy interesante. Un modelo, según ha dicho, ya experimentado y, ante todo, pionero en nuestro país, que requiere de pericia y un equipo muy coordinado, además de ser “tremendamente espectacular y satisfactorio para el participante”. De ahí que sea de la opinión de que esta manera de disfrutar del cielo ha venido para quedarse, más allá de la pandemia de la Covid.
Las personas interesadas en asistir a algunas de las observaciones deberán reservar con antelación contactando con el respectivo ayuntamiento, mientras que para las que se desarrollan en el MUPA hay que llamar al 969 177 051, de lunes a viernes y de 9 a 14 horas.
A diferencia del año pasado, en esta ocasión no hay previstos fenómenos astronómicos de relevancia, por lo que Álvaro ha apuntado que se optará por observaciones más profesionales y, por supuesto, muy interesantes.
Para la delegada de la Junta, estas actividades son un auténtico reclamo que hacen aumentar las posibilidades turísticas de la provincia, al tiempo que sirven para dinamizar la actividad empresarial y económica del medio rural. Muestra de ello, tal y como ha recalcado el presidente de AstroCuenca, bien puede ser el hecho de que desde el mes de marzo hay personas que vienen preguntando sobre las observaciones de este verano e interesándose por participar en ellas.