Hablar de caída vertiginosa de las cifras del turismo en España, en general, y en Cuenca, en particular, durante el mes de junio, cuando se afrontó el final del confinamiento por la pandemia de la Covid-19, no resulta sorprendente, todo lo contrario. Pero, sin embargo, sí llama especialmente la atención la respuesta del sector a raíz del levantamiento del estado de alarma a partir del 21 de ese mismo mes, puesto que solo decidió reabrir sus puertas la mitad de los establecimientos hoteleros de la provincia de Cuenca.
Al menos, así lo pone de manifiesto la última Encuesta de Ocupación Hotelera (EOH) publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que estima en 76 el número de establecimientos conquenses que tomaron esa decisión de los algo más de 140 existentes en la geografía provincial. De hecho, algunos continúan en esa situación y han optado por retrasar su reapertura a los meses de agosto o, incluso, septiembre, pendientes de la evolución de la pandemia y los rebrotes, tal y como apuntaban hace unos días desde la Agrupación Provincial de Hostelería y Turismo de Cuenca.
VIAJEROS Y PERNOCTACIONES
Las cifras del sector hotelero en junio fueron realmente abrumadoras. Y es que el número de viajeros que decicieron pasarse por Cuenca en ese mes se estimaron en 3.580, lo que supuso una caída del 87,5 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior cuando se alcanzaron los 28.642, siendo en su mayoría, el 95 por ciento, turismo nacional y quedando el turismo extranjero en algo testimonial, con un total de 167 visitantes.
La Encuesta de Ocupación Hotelera también refleja que la mayor parte de esos viajeros procedían de tres comunidades autónomas, que no eran otras que Castilla-La Mancha, Comunidad de Madrid y Comunidad Valencia, que representaban el 24,28 por ciento del total, el 22,90% y el 14,40%, respectivamente. Le seguían Cataluña, con el 6,75%; Andalucía, con el 5,91, Galicia, con el 4,85; Castilla y León, con el 4,58; Aragón, con el 2,81; Murcia, con el 2,65; Extremadura, con el 2,52; País Vasco, con el 2,05; Navarra, con el 1,42; La Rioja, con el 1,30; Islas Canarias, con el 0,52; Islas Baleares, con el 0,42; y Cantabria, en último lugar, con el 0,28.
Idéntico comportamiento, como es de esperar, tuvieron las pernoctaciones en ese periodo. Y es que se acercaron a las 6.800, mientras que el año anterior esta cifra se había elevado a las 48.331; es decir, se registró una acusada caída del 86 por ciento.
Los visitantes que optaron por pernoctar en algún establecimiento hotelero conquense lo hicieron por un periodo medio de 1,89 días, siendo su procedencia mayoritaria la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha y Comunidad Valenciana, con un 26,05% del total, un 25,4 y un 12,04, respectivamente. Le siguen Cataluña, con un 6,75%; Castilla y León, con un 6,02; Andalucía, con un 5,21; Galicia, con un 3,84; Extremadura, con un 3,03; País Vasco, con un 2,61; Aragón, con un 2,24; y Murcia, La Rioja, Navarra, Asturias, Islas Canarias, Islas Baleares y Cantabria, todas ellas con menos del 2%.
En cuanto a la ocupación media, por su parte, la EOH indica que alcanzó un porcentaje del 12,90, nada que ver con el 34,54 registrado en junio de 2019.
ALOJAMIENTOS RURALES
Y, como también es de esperar, el turismo en los alojamientos rurales de nuestra provincia durante el mes de junio también cayó estrepitosamente. Los datos del Instituto Nacional de Estadística publicados este mismo jueves indican que se han contabilizado 910 viajeros, lo que supone un descenso del 84 por ciento con respecto al mes de junio de 2019.
Comportamiento que se repite, aunque con menos incidencia, en las pernoctaciones, que se han cifrado en 4.699, que representan una caída del 62 por ciento con respecto a hace un año cuando se estimaron en 12.385. Por último, indicar que la estancia media en este periodo se ha elevado a 5,16 días, mientras que la ocupación se ha quedado en el 16,22 por ciento.
