El presunto autor del crimen de Las Pedroñeras localidad en la que este sábado la Guardia Civil hallaba los cadáveres de una mujer y dos menores en una vivienda, sigue este domingo en dependencias de la Guardia Civil, a la espera de pasar a disposición judicial.
Así lo han confirmado a EFE fuentes del Instituto Armado en Cuenca, que han explicado que el hombre fue detenido ayer, sábado, tras el hallazgo de los tres cadáveres, y que este domingo seguirá en dependencias de la Guardia Civil.
El juzgado de San Clemente (Cuenca) se ha hecho cargo de la investigación tras el crimen de Las Pedroñeras, localidad que ha decretado tres días de luto oficial por lo ocurrido y cuyo Ayuntamiento ha convocado para este lunes, 1 de julio, a las 12.00 horas, un minuto de silencio como signo de repulsa a los hechos.
Cuando se le practique la autopsia, el cadáver de Ammal, la mujer de 30 años presuntamente asesinada a manos de su expareja, será repatriado junto a los de sus hijos a su país de origen, Marruecos, según han indicado a EFE fuentes de su entorno, aunque este aspecto será confirmado en las próximas horas por la familia.
Los tres cuerpos fueron encontrados este sábado, después de que una amiga de la familia diera la voz de alarma el viernes, dado que la mujer no acudió a su puesto de trabajo.
En ese momento se inició una investigación para determinar qué pudo ocurrir y, finalmente, la Guardia Civil halló los cadáveres en una vivienda contigua a donde residía con sus hijos la mujer, que estaba en el sistema VioGén y contaba con una orden de protección en vigor.
Fuentes de la investigación han indicado a EFE que las cámaras de seguridad instaladas en el principal parque de la localidad han sido claves para determinar los movimientos del detenido, la expareja de la víctima.
El hombre debía realizar durante los fines de semana tareas en beneficio de la comunidad y una de sus encomiendas era llevar a cabo la limpieza del parque, donde, presuntamente, se refugió tras lo ocurrido, han explicado.
Las Pedroñeras es una localidad conquense de unos 6.600 habitantes, donde cerca del 15 por ciento de la población es de origen musulmán.
El municipio, conocido como la capital del ajo morado, ha atraído durante décadas mano de obra, principalmente de países como Marruecos, para trabajar en la campaña del ajo.