El Ayuntamiento de Santa María de los Llanos exige al Ministerio de Fomento que adopte una solución para garantizar la seguridad vial en la intersección de la Nacional 420 con el ‘carreterín de Buenavista’, un camino rural asfaltado que une este municipio con Los Hinojosos y que es muy utilizado por los vecinos que se desplazan a la capital provincial, además de por numerosos vehículos agrícolas.
La petición no es nueva, hace quince años que el consistorio viene reclamando que se mejore la seguridad en esta intersección (kilómetro 331,500) por la peligrosidad que entraña. De hecho, recuerdan que han sido varios los accidentes mortales que se han producido, pero hasta el momento no han tomado medidas, por lo que la Corporación en pleno ha vuelto a exigir que se adopte una solución.
En este sentido, el primer teniente de alcalde, Ovidio González, lamenta la respuesta que recientemente les ha trasladado la subdelegada del Gobierno en Cuenca, María Lidón Lozano, en la que entre otras cuestiones de índole técnica , señala que este tramo no puede considerarse de alta siniestralidad puesto que hace más de 13 años que no se han producido accidentes.
“No sé si es que tiene que morir alguien más para que se considere un punto negro y entonces tomar las medidas que venimos reclamando para evitarlos”, apostilla González, quien destaca que si bien es cierto que hace tiempo que no hay accidentes con víctimas, si son muchos los sinestros con resultado de daños materiales los que se registran.
“Consideramos que solamente con que exista la posibilidad de que pudieran producirse nuevos accidentes con víctimas es motivo suficiente para que por parte del Ministerio de Fomento se prevea algún tipo de actuación”, señalan en el escrito que firmado por todos los miembros de la Corporación Municipal se remitió a la Subdelegación, y en el que se pide que la Unidad de Carreteras del Estado tenga en cuenta una actuación de mejora y la dote presupuestariamente.
La propuesta que hace el ayuntamiento es la ejecución de un carril de aceleración que permita la incorporación desde el camino a la N-420 y un carril que permita virar desde la carretera al camino sin exponer al conductor al tráfico de la carretera nacional.
Y es que, según señala Ovidio González, hay que salir de la N-420 y girar en la calzada de la misma para entrar en el camino asfaltado que lleva a Santa María . “Al realizar esta maniobra se produce una situación muy peligrosa puesto que el conductor, aún poniendo la intermitencia, queda expuesto a los vehículos que transiten por la nacional, que además en muchas ocasiones exceden el límite de velocidad por lo que se resta capacidad de reacción. Son muchos los vehículos que se han visto implicados en accidentes y en situaciones de peligro realizando esta maniobra”, insiste el primer teniente de alcalde de Santa María. de los Llanos.
En este punto destaca que son muchas las personas que se exponen al peligro puesto que se trata de un camino que por estar asfaltado y acortar distancias para trasladarse a Cuenca registra una importante afluencia de turismos, además de vehículos agrícolas y también de vehículos pesados que transcurren por este punto para incorporarse a la Nacional 420 desde la N-301 y viceversa.