La reforma del convento de Santo Domingo de Huete permitirá sacarlo de la lista roja de patrimonio

La adquisición y rehabilitación, por parte de la Diputación Provincial de Cuenca, del Convento de Santo Domingo de Guzmán de Huete va a permitir sacarlo de la Lista Roja de Patrimonio, en la que fue incluido en el año 2007. La Asociación Hispania Nostra se ha puesto en contacto con la Institución provincial pidiendo que se le remita información sobre la adquisición y próxima rehabilitación integral de esta joya barroca con el objeto de que su Comité Científico estudie la nueva situación del edificio y, de esta manera, sacarlo del listado del Patrimonio Cultural Español en peligro de desaparición o destrucción.

Para el diputado de Cultura, Francisco Javier Doménech, esto viene a corroborar que la operación de la Diputación con este inmueble ha sido “ejemplar” y va a ir cumpliendo los objetivos marcados, ya que además de evitar que la obra más importante del periodo protobarroco en la provincia se pierda irreparablemente ante su avanzado estado de deterioro va a incrementar el atractivo turístico y cultural de Huete y su comarca, esperando que favorezca el desarrollo económico de la zona.

La Diputación conquense formalizó a finales del pasado mes de diciembre la compra de este edificio del siglo XVII y el solar anexo donde se encontraba el Convento de Santo Domingo de Guzmán por un importe de 120.000 euros. Posteriormente, lo ha incluido para su recuperación integral en el Plan de Rehabilitación, Conservación y Protección del Patrimonio de la provincia, que contempla una treintena de actuaciones con un presupuesto total de 4,9 millones de euros procedentes de fondos propios de la institución.

En concreto, la Diputación ha contemplado una intervención en este edificio del siglo XVII por valor de 400.000 euros con el fin de acometer una rehabilitación urgente e integral para su consolidación. De hecho, el proyecto ya está redactado y se han dado los primeros pasos para iniciar el expediente de licitación de la primera fase de estas obras, que contempla un plazo de ejecución de 152 días y que se centrará en la recuperación de las cubiertas existentes, contemplando diferentes niveles de intervención en función del grado de deterioro y respetando la esencia y el volumen de las originales, además de actuar en tres de sus fachadas, respetando los parámetros exteriores de piedra y procediendo a la recuperación y consolidación de los lienzos existentes y de los elementos relevantes.

No obstante, aún se está a la espera de recibir el visto bueno del Servicio de Patrimonio de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para poder acometer esta rehabilitación a todas luces “urgente” y “muy necesaria”, que va a favorecer el desarrollo de una comarca tan necesitada de inversiones como es La Alcarria conquense, según ha incidido el diputado de Cultura.