ATC Villar de Cañas
De la disminución de obras a la pérdida de empresas, los perjuicios del proyecto del ATC
El 27 de diciembre de 2023 se cerró definitivamente el proyecto del Almacén Temporal Centralizado de residuos nucleares en Villar de Cañas con la aprobación definitiva el séptimo plan de residuos radioactivos aprobado por el Consejo de Ministros, y que da carpetazo definitivo a esta instalación que llevaba en liza desde diciembre de 2011.
Una decisión que, aunque el alcalde de la localidad la recibió como un jarro de agua fría, ha supuesto una gran satisfacción tanto de la plataforma contra el cementerio nuclear, así como de alcaldes, empresarios y activistas de la comarca, quienes durante la última década han estado luchando de forma activa para frenar la construcción del ATC en Villar de Cañas.
Con motivo de este carpetazo, varias de esas personas que declararon la guerra a la instalación nuclear han tomado la palabra para defender su versión de los hechos y “rechazar el relato que ha recibido el foco mediático durante los últimos años”.
De este modo, han estado presentes en una charla ofrecida en el Centro Joven de la capital conquense Carlos Villeta, coordinador de la plataforma contra el ATC; Tomás Borona, alcalde de Alconchel de la Estrella y José Vicente Garde, empresario de la construcción que trabaja en la comarca y, además, primo del ex alcalde de Villar de Cañas, José María Saiz; y Anronio Carrascosa, activista de Villar de Cañas.
Villeta ha explicado que ahora que se ha dado carpetazo definitivo al ATC, las diferentes administraciones como la Junta o la Diputación de Cuenca están anunciando proyectos alternativos de energías renovables para Villar de Cañas, algo que lo que, a su juicio, “no son merecedores” dado que “lo único que han hecho sus alcaldes es poner en peligro la comarca y la provincia”, y lo “único que se merecen es el reproche social sin ningún tipo de proyecto alternativo”.
COMPENSACIÓN POR EL DINERO QUE SE HA DEJADO DE RECIBIR
El regidor de Alconchel de la Estrella ha recordado cómo todo este asunto fue una decisión política de los ex presidentes Mariano Rajoy y María Dolores de Cospedal. Su pueblo se opuso desde el minuto uno, e inició una larga batalla a pie de calle para evitar la instalación del ATC, mientras que otros pueblos cercanos no se implicaron. Con motivo de estas marchas que organizaba el ayuntamiento, “Enresa quiso comprar voluntades, y por eso ha estado dando desde entonces entre 20.000 y 25.000 euros anuales a los municipios a fondo perdido”.
Borona ha asegurado que desde el primer momento que le ofrecieron esta ayuda la descartó totalmente, y no la ha estado cobrando, al igual que el Ayuntamiento del Hito que también la rechazó. “No tiene sentido que, antes incluso de que se adjudicaran las obras, Enresa ya estuviera pagando a los municipios limítrofes”, ha asegurado, incidiendo en que si esta construcción hubiera sido realmente buena, “estaría instalada en zonas más industrializadas como Cataluña o Madrid”.
Al mismo tiempo, el alcalde ha enfatizado que los ayuntamientos que rechazaron ese dinero se ven en inferioridad de condiciones respecto al resto, y no concibe que, rechazando el dinero de Enresa, no se les compense de alguna forma como sí parece que va a ocurrir con Villar de Cañas. “Queremos que a los ayuntamientos que hemos estado luchando contra el vertedero nuclear también se nos compense”, ha zanjado Borona.
Por ese modo, ha asegurado que junto a la plataforma del ATC se va a estudiar con una abogada
PÉRDIDAS DE EMRESAS Y VOLUMEN DE NEGOCIO
José Vicente Garde, empresario de la construcción y familiar del ex alcalde Saiz, no había hablado hasta ahora, pero ha querido exponer todo lo que ha vivido desde que se anunciara la instalación del ATC en Villar de Cañas. El ejerce su oficio en toda la comarca, donde ha llevado a cabo numerosas construcciones de chalets, sobre todo en la urbanización de Casalonga, así como en otros pueblos del entorno. En cuanto se anunció el proyecto, su cartera de clientes comenzó a bajar exponencialmente, puesto que nadie estaba ya dispuesto a invertir y vivir en una zona donde iba a abrir sus puertas un almacén de residuos nucleares.
Además, lo primero que le dijeron desde Enresa, fue que él no iba a poder licitar a las obras de construcción del silo, dado que los adjudicatarios deberían ser empresas especializadas y que, seguramente, sería una extranjera la encargada de construir el ATC.
“Desde un primer momento vi que nada de esto era legítimo, porque además se designó a Villar de Cañas sin hacer antes ningún tipo de estudio o proyecto, algo básico que cualquier constructor debe hacer para saber si el terreno es favorable o no”, ha subrayado.
Además, ha expuesto “una serie de mentiras” que desde Enresa trasladaron a los vecinos y empresarios de la comarca, todas ellas centradas en la seguridad del silo nuclear. “Lo que iba a provocar esta instalación, y que nunca se dijo, es que en un entorno de 2 kilómetros iba a haber un microclima donde toda la vegetación iba a estar achicharrada, porque los residuos están a unos 400 grados de temperatura y toda esa zona no iba a poder tener ni uso agrícola ni ganadero”.
Por ese motivo, cree Garde que se les vendió la moto “de la mejor manera posible para que todo sonara muy bonito, pero nadie dijo los problemas que podían surgir. Hasta trajeron a un oncólogo que solo dijo mentiras, y que fueron rebatidas por médicos de Cuenca”.
Además, también ha visto durante este tiempo como en la comarca, aparte de perder clientela, también ha perdido otras opciones de inversión. Y es que, han sido varias las empresas o autónomos que se han ido a desarrollar su actividad económica lejos de Villar de Cañas, como fue una mujer que iba a abrir una fábrica de queso y que decidió alejarse de la comarca por las consecuencias que podría tener el residuo nuclear del ATC en su producto.
Por último, Villeta ha confirmado que la plataforma contra el ATC va a continuar funcionando, dado que ahora centrará sus esfuerzos en conseguir la reparación a los pueblos de la comarca afectados para que se instalen ahí otros proyectos que generen riqueza económica y “se haga justicia”. También quieren hacer un seguimiento de todo el recorrido que han avanzado estos años y comprobar que, por lo que han luchado, de verdad acaba sepultado, así como trabajar por la construcción de un Almacén Geológico Profundo que descarte totalmente el ATC.
“Nuestra postura que era la minoritaria, al final ha sido la que ha ganado, y de hecho muchos párrafos que había en nuestras alegaciones, están tal cual ahora en el séptimo plan de residuos nucleares”, ha concluido Villeta.