La Pasión Viviente de Motilla del Palancar reordena escenarios para acortar tiempos

Motilla del Palancar volverá a convertirse este Sábado de Dolores en un gran escenario en el que se recrearán los últimos momentos de Jesucristo. Más de doscientas personas escenificarán la Pasión Viviente, que cumple su trigésima edición y que este año adelanta su hora de inicio a las 18:30 horas y reordena los escenarios para reducir los tiempos entre escenas con el fin de dinamizar el acto y que no se alargue en demasía la representación, organizada por la Asociación Amigos del Teatro de la localidad.   

A pesar de las dificultades atravesadas para la renovación de la junta directiva de este colectivo, que pusieron incluso en duda la continuidad de La Pasión de Motilla, la asociación ha sacado adelante “con mucha ilusión” y en un tiempo récord una nueva edición de este evento, que consiguió la declaración de Interés Turístico regional en 2010. “Estamos muy contentos”, subraya su nuevo presidente, Antonio García Monedero, que indica que el ajuste en los escenarios busca que la representación no se prolongue mucho más allá de las nueve de la noche y sea más atractiva para el espectador, sobre todo pensando en que el visitante que viene de fuera se quede a cenar en los establecimientos del municipio.

“Es un gran reclamo turístico para Motilla”, apunta el responsable de la asociación, quien detalla que otra de las novedades de esta edición es que ha habido cambios en personajes importantes como Pilatos, Herodes, Pedro, Juan y Anás. En su caso, representará al Mal Ladrón después de haber hecho en las últimas ediciones de Herodes, habiendo encarnado también durante cuatro años el papel de Jesucristo. Además, se ha ampliado el número de ángeles debido al gran interés de los niños y niñas en participar.

La representación se divide en 17 escenas –que se desarrollan en el Espacio Multiusos, la Ronda Sur, el parque El Carrascal y El Calvario– en los que se teatralizan pasajes de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo según cuentan los Evangelios.