La normalidad va regresando a las carreteras conquenses tras Filomena

Una semana después de que la borrasca Filomena dejara paso a una ola de intenso frío, las carreteras de la provincia de Cuenca van regresando poco a poco a la normalidad y ya no solo no hay obligatoriedad de uso de cadenas, sino que tampoco se prohíbe la circulación a vehículos pesados. Y es que las únicas carreteras que tienen condicionada la circulación, se encuentran en nivel verde y, por lo tanto, tan solo es necesario tener precaución por la presencia de placas de hielo. En esta situación se encuentran 414 kilómetros de 11 carreteras de la provincia, tanto de la red viaria principal como de la autonómica.

El parte de carreteras de la Guardia Civil indica que a primera hora de la mañana es necesario tener prudencia en la N-420, entre Cuenca y Salvacañete; la CM-200, desde Villamayor de Santiago y Saceda-Trasierra; la CM-310, de Villamayor de Santiago y Cañaveras; la CM-2002, entre las localidades de Huete y Villalba del Rey; la CM-2019, de Huete a Villarejo de la Peñuela; la CM-2100, de Valhermoso de la Fuente y Arcas; la CM-2104, desde el kilómetro 14 al 25, a la altura de Valdecabras; la CM-2106, entre Huélamo y Masegosa; la CM-2119, en el entorno del puerto de El Cubillo; la CM-2201, desde Beteta a Masegosa; y la CM-3011, entre Villarrubio y Belmonte.

Teniendo en cuenta las previsiones meteorológicas, la mejoría en nuestras carreteras irá siendo más notoria según vaya transcurriendo la semana.