Si ha habido esta semana una noticia de la que todo el mundo ha estado pendiente, esa ha sido la del temporal de nieve. La provincia de Cuenca ha sido una de las más afectadas de la región. Rutas escolares suspendidas, carreteras cortadas, incomunicación de algunos pueblos, atascos, dificultad de acceso por los cascos urbanos... las complicaciones han sido muchas, pero los beneficios también.
La Mancha, una zona en la que no es habitual que nieve, se cubría con un manto blanco que alcanzaba espesores que hace tiempo que no se recuerdan. En algunas zonas se registraron más de 25 centímetros de nieve. Mucha agua que llega como una bendición para los campos, agotados ya por la sequía que se viene padeciendo durante los últimos años.
Las precipitaciones de nieve de esta semana dan un respiro a toda la provincia, favoreciendo a todos los cultivos. Viña, olivar, almendros, hortícolas... y, sobre todo, ahora, al cereal, puesto que como destaca el director provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Joaquín Cuadrado, “este es el mejor momento para que las siembras reciban un aporte de agua”.
Y el de la nieve es el mejor que podía recibir. No en vano se trata del mejor almacenamiento de agua con el que pueden contar los campos. “Es mucho mejor que el agua de lluvia porque entra poco a poco en la tierra. No hay escorrentía , el agua llega al suelo por fundición y, por tanto, se aprovecha toda”. apostilla Cuadrado. Además, en el caso del cereal, aumenta su capacidad de ahijamiento.
El miércoles, salvo escasamente en algunos puntos de La Mancha, dejó de nevar y llegaron las heladas pero la capa de nieve que mantiene la superficie es un buen aliado para proteger a los cultivos. “La nieve crea una película que no baja de cero grados, con lo cual hace un efecto iglú de aislamiento que evita que los cultivos se hielen”, apostilla Joaquín Cuadrado.
El director provincial de Agricultura señala que aunque no hay cálculos, el aporte de agua que ha dejado el temporal de nieve en la provincia “es muy grande”.
De esta forma, la nieve permitirá la recuperación de cultivos que se veían amenazados ante la escasez de agua, mejorará la recarga de acuíferos, y en producciones hortícolas de regadío como, por ejemplo, el ajo, permitirá que los agricultores aguanten todo el mes de febrero sin regar.
Algo, que según señala el diputado provincial, Francisco Javier Moya, “es muy importante” porque en La Mancha, ante los recortes en las concesiones aplicadas por la Confederación Hidrográfica del Guadiana en la masa de agua subterránea de la Sierra de Altomira ( que abarca 58 municipios de la provincia) “sin este aporte de humedad nos habríamos quedado sin agua en el mes de mayo”.
Procesionaria
Por otro lado, el director provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural destaca que la nieve y las bajas temperaturas de estos días ayudarán a frenar el ataque de la procesionaria del pino al causar la mortandad de la oruga.
