El parque cinegético de El Hosquillo tiene un nuevo habitante, un osezno nacido este invierno que está haciendo las delicias de los visitantes.
Con este nuevo osezno, el parque vuelve a tener diez ejemplares de oso pardo dado que la población se había reducido a nueve tras morir esta temporada invernal Silvia, la osa más veterana.
No obstante, todavía no está asegurada la supervivencia del osezno, ya que a menudo el macho suele matar a las crías para que la hembra vuelva a salir en celo , y asegurarse de tener su propia descendencia.
De momento tampoco se sabe si es hembra o macho y es que para poder saberlo es necesario dormir al osezno y esto es algo que no se hace más adelante, cuando tenga una mayor fortaleza.
Los oseznos nacen durante la hibernación, entre finales de diciembre y enero, y la madre los saca ahora con la llegada del buen tiempo.
El parque cinegético de El Hosquillo abría el 27 de marzo nueva temporadad de visitas, que se prolongará hasta principios de diciembre. Debido a la situación de pandemia y la normativa sanitaria las visitas, que son guiadas por monitores, están limitadas. El número máximo de personas por turno podrá sufrir modificaciones dependiendo de la evolución de la situación sanitaria.
En el Hosquillo, con una superficie cercana a las 1.000 hectáreas, se crían en semilibertad una amplia variedad de especies cinegéticas, rapaces y aves protegidas.
