El diseño de unas originales y vistosas cajas contenedoras para el transporte y exposición de frutas y verduras en el establecimiento de venta le ha valido a la joven Raquel Muñoz Martínez, del municipio conquense de Mota del Cuervo y estudiante de la Escuela de Arte Antonio López de Tomelloso (Ciudad Real), la medalla de plata en el certamen internacional WorldStar Student Awards.
“Estoy muy contenta. Significa el máximo reconocimiento. Aún no me lo creo”, celebra la joven, de 26 años, que estudia el último curso del Grado de Diseño de Producto, formación que compagina con su trabajo en la Joyería Grande, en Tomelloso, donde se ocupa del diseño del producto.
El proyecto por el que ahora ha sido premiada Raquel Muñoz forma parte de un trabajo para la asignatura Envases y embalajes. Raquel Muñoz eligió a la empresa valenciana Logifruit, especializada en envases, y diseñó una caja para productos hortofrutícolas.
Algunos de los estudiantes aprovecharon este trabajo de clase para presentarlo a los Premios Nacionales de Envase y Embalaje, organizados en Valencia por el Clúster de Innovación en Envases y Embalaje, en los que logró un accésit.
Los mejores proyectos concurrieron después a los Premios Líderpack que convocan Graphispack Asociación y el salón Hispack de Fira de Barcelona. Y de entre los mejores trabajos de este certamen, España seleccionó a cinco en el ámbito del diseño joven para presentarlos al WorldStar Student Awards, entre ellos el de Raquel Muñoz, que ha logrado la medalla de plata.
Es la primera vez que una española se alza con uno de los premios de este certamen, cuya ceremonia de entrega de los galardones tendrá lugar el 8 de mayo en Düsseldorf (Alemania) en el marco de la Feria Interpack 2020.
Junto a Raquel Muñoz también han sido reconocidos en los WorldStar Student Awards tres estudiantes chinos que presentaron un envase para medicamentos con un sistema especial de dosificación, que se alzó con el primer premio; y dos estudiantes turcos que concurrían con un packaging doble para ketchup y mayonesa, que han conseguido el tercer puesto.
El trabajo español premiado, el Proyecto Logifruit, consiste en el diseño de unas cajas para verduras y frutas que incorporan unas asas que, por un lado, son abatibles para facilitar el transporte y, por otro, si se despliegan, permiten el apilado para su uso como expositor de los productos en el punto de venta.
El apilado de estas cajas permite una “mayor accesibilidad en un menor espacio” dado que queda un hueco entre ellas que posibilita llegar a los productos que hay en las de abajo sin tener que levantar las de arriba, algo que no ocurre con los contenedores habituales.
También ocupa un lugar prioritario en este trabajo la estética, algo a lo que normalmente no se le suele prestar mucha atención en este tipo de cajas, como recalca la joven. Así, primero hizo un estudio de los colores más frecuentes de las verduras y hortalizas y, tras observar que verdes y amarillos son los que más predominan, eligió el tono complementario, el rojo, para que el embalaje destacase y quedase vistoso.
Además, estas cajas también incluyen perforaciones circulares que se asemejan a los lunares de un vestido de flamenca, lo que busca conseguir una “estética Made in Spain” para poner en valor los productos españoles.
UNA VOCACIÓN CLARA
A esta conquense le interesa el mundo del diseño desde que era muy joven por lo que cursó el Bachillerato en la Escuela de Arte José María Cruz Novillo de Cuenca, centro en el que luego se formó también como técnico en Proyectos y Dirección de Obras de Decoración.
Le gustó el diseño de interiores y, para complementar su formación, se fue a Tomelloso, donde estudió Mobiliario. “Vi que no me quería centrar solo en eso sino que me interesaba tener un campo más abierto y empecé el grado”, recuerda.
Su sueño ahora es montar un estudio de diseño que abarque varios ámbitos puesto que le interesan tanto la moda (joyas y complementos) como el mobiliario. “El mundo del interiorismo me gusta mucho”, concluye.
