Más del 90% de los conquenses se ha quedado en su zona durante la pandemia

Más del 90 por ciento de los conquenses han permanecido en su zona de residencia durante la pandemia. Al menos así se refleja en el estudio de movilidad DataCOVID, que ha hecho público la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial junto al Instituto Nacional de Estadística (INE) y con el que se ha analizado el movimiento de los españoles durante el Estado de Alarma, gracias a los datos proporcionados por las grandes operadoras de telefonía.

Para ello se ha divido el territorio nacional en 3.200 áreas de movilidad, que en nuestra provincia son algo más de una veintena, con el fin de ayudar al Gobierno a conocer cuáles son los movimientos de los ciudadanos en las últimas semanas. Eso sí, hay que tener en cuenta que estamos ante datos anonimizados y por lo tanto no significan que los ciudadanos no hayan salido de sus casas, sino que no lo han hecho de su zona de residencia.

Un estudio que sitúa el área de Priego como la zona de la provincia donde la práctica totalidad de sus 4.832 residentes, concretamente, el 98,3%, ha decidido permanecer en su zona y no abandonarla desde la entrada en vigor del Estado de Alarma, a mediados de marzo, hasta el 9 de abril, última fecha incluida en este informe. Área de Priego que en este estudio abarca desde El Pozuelo, Beteta y Lagunaseca hasta la localidad pricense, Cañizares, Cañamares y la Frontera, pasando por otros municipios como Sotorribas, Mariana, Las Majadas o Villalba de la Sierra, entre otros.

Cabe destacar que en esta zona, mientras que en noviembre del pasado año (mes de referencia en este estudio) el 30,42 por ciento de la población se desplazaba a otras áreas, este porcentaje descendió al 5,26 el primer día de la cuarentena, mientras que la cifra más baja se registraba el domingo, 22 de marzo, con un 0,99%, para llegar al 9 de abril con el 1,7.

Comportamiento similar se ha registrado en el área de Huete, que abarca desde Buendía, Valle de Altomira, Alcázar del Rey y Palomares del Campo hasta Villarejo de Fuentes, Carrascosa del Campo y Los Valdecolmenas, pasando por Abia de la Obispalía y Huerta de la Obispalía, entre otros. En total, una población de 4.830 personas, de la que el 97,6 por ciento no ha salido de su área. Sí lo hicieron al principio del confinamiento el 6,54 por ciento de los ciudadanos, bajando al 1,41% el domingo, 5 de abril, para quedarse en el 2,36 el último día del estudio, el 9 de abril.

ZONA DE TARANCÓN Y LA MANCHA

Los taranconeros, por su parte, no han sido una excepción y en este periodo de cuarentena han optado por no abandonar su municipio el 97,24 por ciento, siendo el pasado 22 de marzo el día que menos gente salió, con el 98,37%.

Nada que ver con el área de Barajas de Melo, con 4.901 habitantes, que se extiende desde Zarza de Tajo, Belinchón y Uclés hasta Pozorrubio, Almonacid del Marquesado y Montalbo, pasando por Almendros, Saelices o Villarrubio, entre otros. Y es que aquí el último dato de abril indica que se han desplazado de esta zona el 7,2 por ciento de la población, mientras que al principio del estado de alarma fue el 12,39%.

Sin dejar La Mancha, señalar que los últimos datos de este informe reflejan que solo el 4,23 por ciento de los habitantes de Las Pedroñeras abandonaron el municipio el 9 de abril, mientras que en Mota del Cuervo y San Clemente lo hicieron el 3,27 y el 4,21%, respectivamente.

LA MANCHUELA

Cambiando de comarca, en Motilla del Palancar, con 5.869 personas, se ha pasado de que en noviembre del pasado año dejara habitualmente la localidad el 9,2 por ciento de su población al 6,6 del inicio de la cuarentena y al 3,27 del 9 de abril.

La diferencia es mucho mayor en el área de Minglanilla, que integra también a las localidades de Graja de Iniesta, Castillejo de Iniesta y Villalpardo, aglutinando un total de 4.733 habitantes. Aquí, se ha pasado de que habitualmente el 21,5% de la población se desplace a otros lugares al 2,3 del pasado 22 de marzo o el 4,9 del 9 de abril.

En la cercana localidad de Quintanar del Rey, por su parte, con 7.486 personas, al inicio del estado de alarma salían a otras zonas el 6,84% de la población, mientras que el 22 de marzo se registró el menor porcentaje con el 1,36, aunque ya en abril creció hasta el 4,63.

Sin ir muy lejos, el área de Campillo de Altobuey, con 4.650 personas, que incluye desde Monteagudo de las Salinas, Víllora y Mira hasta La Pesquera y Barchín del Hoyo, pasando, entre otros, por Piqueras del Castillo, Almodóvar del Pinar o Enguídanos, arroja unos datos bastante diferentes. Y es que en esta zona suelen desplazarse a otros lugares el 23,2 por ciento de la población, como así ocurrió en noviembre pasado, sin embargo, con la entrada en vigor del Estado de Alarma este porcentaje se redujo al 8,3, que se redujo aún más hasta el 2,3 el 22 de marzo para llegar al 4,8 el pasado 9 de abril.

LA SERRANÍA Y CUENCA

En La Serranía conquense, los datos de estudio no varían mucho con respecto a esta última área. Sirva de ejemplo la zona de Landete, con 4.935 personas, que se extiende desde Salvacañete, Boniches y Alcalá de la Vega hasta Moya, Santa Cruz de Moya, Villar del Humo, y Garaballa, pasando por Talayuelas y Aliaguilla, entre otros. Aquí, mientras que en el pasado mes de noviembre el 25,1 por ciento de los ciudadanos abandonaba asiduamente su zona de residencia, en la cuarentena -concretamente, del 16 y 22 de marzo- este porcentaje se ha reducido al 6,12 y al 1,32 , respectivamente, así como al 4,1 el 9 de abril.

Este estudio de movilidad de la población aborda la zona de la capital conquense diseñando tres áreas distintas, denominadas Distrito 1 y 2, con 3.761 habitantes, Distrito 3, con 12.251, y Distrito 4, con 40.592. De esta manera, en relación al Distrito 1 y 2, que se extiende desde la capital hasta Buenache de la Sierra, Uña, Tragacete y Vega del Codorno, señalar que se ha experimentado un descenso muy notable en los desplazamientos de la población. Y es que se ha pasado del 51,9 por ciento de noviembre de 2019 al 17,5 del inicio del confinamiento y al 5,4 del 9 de abril.

En el Distrito 3, que abarca, además de parte de la capital, desde Nohales y Chillarón hasta Fuentenava de Jábaga, pasando por Villanueva de los Escuderos, Tondos, Arcos de la Sierra y Valdecabrillas, se ha pasado de que el 15,2 por ciento de la población abandonara la zona al inicio del Estado de Alarma a que lo haga solo el 9,22.

Se completa el estudio de la población de la capital con el Distrito 4, que se limita a Cuenca y La Melgosa y en el que solo el 17,01 por ciento de la población solía desplazarse habitualmente a otros lugares. Porcentaje que, sin embargo, se ha visto reducido durante la pandemia al 8,05 del inicio de la cuarentena y al 4,12 del 9 de abril.

En esta zona de la provincia llama especialmente la atención el área de Arcas, con una población de 5.352 habitantes, puesto que se ha incluido desde Huélamo, Beamud y Zafrilla hasta Arguisuelas, Fuentes y Carboneras de Guadazaón, pasando, entre otros, por Cañete, Cañada del Hoyo, La Cierva y Pajarón. Y es que la pandemia de la COVID-19 ha provocado que se haya pasado de que algo más del 30 por ciento de la población se desplazara a otros lugares asiduamente a que solo lo haga el 3,8 por ciento, como así ocurría el 9 de abril.

Entre los numerosos datos que ha dejado este estudio de la movilidad de la población, cabe destacar el hecho de que en todas las zonas de la provincia los domingos, 22 de marzo y 5 de abril, han sido los días del confinamiento en los que menos movimientos de la población se ha registrado, marcando, incluso, en muchos de ellos el mínimo de todo el periodo del Estado de Alarma.