Las intensas lluvias que han caído en las últimas semanas en la provincia de Cuenca han hecho aumentar considerablemente el caudal de ríos menores como el Escabas, en Cañamares, en la comarca de La Serranía, que se desbordado en algunos puntos como la popular zona de recreo de "La playeta".
El alcalde de Cañamares, Arturo Guijarro, ha confirmado a Efe que baja desbordado este río serrano, un afluente del río Guadiela cuyas aguas nutren al embalse de Buendía, en la zona del Alto Tajo.
El regidor ha detallado que el Escabas se ha desbordado por la parte más baja del pueblo, por la zona de las huertas en las que se plantan mimbres, aunque ha aclarado que no hay ningún problema de seguridad en el casco urbano ni para los vecinos de la localidad.
Guijarro ha reconocido que hacía "años" que en el pueblo no veían una estampa similar en el cauce del río, que también se ha desbordado en la zona recreativa de 'La playeta', muy concurrida en verano, donde el agua se aproxima a la carretera autonómica CM-210.
Las lluvias también han aumentado considerablemente el caudal del río Júcar a su paso por la ciudad de Cuenca, que superaba a las 14.00 horas de este martes, los 70 metros cúbicos por segundo.
Esta crecida ha obligado al Ayuntamiento de Cuenca a cerrar la ribera del río y pedir precaución a los ciudadanos para que no se aproximen a ella.
El Ayuntamiento está pendiente de lo que ocurra en el embalse de La Toba, ubicado en La Serranía Alta, ya que cuando se hacen desembalses se produce una crecida considerable del Júcar.