La tormenta que ha anegado Iniesta comenzó a las 19:00 horas de este miércoles y prácticamente duró dos horas y cuarto. Minutos antes de la tromba de agua también se produjo una fuerte granizada que ha ocasionado daños en viñedos y plantaciones de la zona.
La localidad se encuentra rodeada por dos arroyos y tres ramblas que se desbordaron provocando grandes riadas que arastraron coches, furgonetas y mobiliario urbano en el barrio Las Malvinas y las Calles Flores y Júcar especialmente.
Por ahora, es dificil calificar los daños, aunque el alcalde de Iniesta, José Luis Merino, asegura que "la situación es dramática".
"He vivido las peores horas de vida", señala el primer edil, quien ha comprobado de primera mano la situación en la zona cero del suceso durante toda la mañana de este jueves.
Las labores de limpieza y rescate comenzaron en la noche del miércoles cuando unas 150 personas fueron evacuadas de sus domicilios y reubicadas en viviendas de familiares y amigos, aunque hubo quien tuvo que hacer uso de un hotel para poder pasar la noche.
"Eran gente mayor y los vecinos prestaron su maquinaria pesada para ayudar porque no podían pasar ni los bomberos", ha explicado. Estas personas ya han regresado a sus casas y afortunadamente no hay que lamentar daños personales.
"Todavía quedan muchos días para recuperar la normalidad", ha señalado el edil, al tiempo que agrade el apoyo de los efectivos movilizados por los pueblos vecinos, la Junta y la Diputación Provincial.
