La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) de Castilla-La Mancha ha advertido este viernes de que las heladas de primavera están provocando daños en el almendro de la región en las principales zonas productoras.
En un comunicado de prensa, Asaja ha informado de que la primera valoración de los técnicos de la organización arroja que las parcelas afectadas contemplan daños de entre el 80 y el cien por cien, lo que se traducirá en "importantes pérdidas económicas" para los agricultores afectados, ha lamentado.
Albacete, Cuenca y Toledo son las tres provincias que han sufrido daños en los almendros por causa de las heladas. En el caso de la provincia de Cuenca los daños más cuantiosos se localizan en La Manchuela, concretemente entre los municipios afectados se encuentran Minglanilla, Villalpardo, Puebla del Salvador, La Pesquera, Vallehermoso de la Fuente, Buenache de Alarcón, Villanueva de la Jara, Aliaguilla e Iniesta fundamentalmente.
Según Asaja, los días 28 y 29 de marzo se alcanzaron temperaturas mínimas que afectaron "de manera seria" al cultivo, y además ha indicado que las previsiones para este fin de semana no son mejores.
De hecho, ha incidido en que los daños podrían suponer una cosecha "un 70 % inferior a la de la última campaña", aunque ha precisado que habrá que esperar unos días para poder estimar los efectos reales, tanto en variedades tempranas como en tardías.
Ante esta situación, Asaja ha pedido al Gobierno regional que haga las gestiones oportunas para que el Ministerio de Agricultura aplique la reducción de los módulos del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a los agricultores afectados.
De igual forma, ha solicitado que se revise y mejore el sistema de seguros agrarios porque aunque se trate de una herramienta útil, "todavía tiene muchas deficiencias que deben corregirse de manera inmediata", ha resaltado.
En este sentido, ha explicado que los seguros ofrecen primas muy altas y coberturas de "dudosa asegurabilidad", por lo que ha pedido que se adapten para que las condiciones, las tarifas o las indemnizaciones cubran las necesidades reales de los productores.