Grenergy invertirá más de 200 millones de euros en dos parques solares en la provincia

Pese a la complicada situación originada por la pandemia de la COVID-19, la empresa de energías renovables Grenergy mantiene su fuerte apuesta inversora en nuestro país, después de varios años en el mercado latinoamericano, y continúa adelante con dos importantes proyectos que tienen a la provincia de Cuenca como escenario; en concreto, dos parques fotovoltaicos, uno denominado “Escuderos”, que se ubicará en el término municipal de Altarejos, y otro llamado “Belinchón”, que se emplazará en Barajas de Melo.

En total, una inversión global de más de 200 millones de euros, que, según el presidente del Consejo de Administración y consejero delegado de Grenergy, David Ruiz de Andrés, conllevaría, una vez en funcionamiento, la generación de energía suficiente para abastecer de electricidad a más de 200.000 hogares.

El proyecto del parque solar “Escuderos” es el más avanzado de los dos. De hecho, según detalla su CEO, Grenergy tiene todo listo para iniciar su construcción en cuanto el Gobierno de Castilla-La Mancha les conceda las autorizaciones pertinentes. Y es que, tal y como puntualiza, “ya tenemos firmado desde hace meses el contrato de venta de energía (PPA), disponemos de la financiación necesaria que está comprometida con un sindicado de banco alemanes, contamos con la declaración favorable de impacto medioambiental y tan solo estamos a la espera de la autorización de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para poder iniciar los trabajos de inmediato”.

Una autorización que, según explica, normalmente se hubiera recibido en los meses de febrero o marzo, pero la declaración del Estado de Alarma por la pandemia de la COVID-19 está llevando consigo un retraso considerable. No obstante, Ruiz espera que, más pronto que tarde, estas autorizaciones del Gobierno regional estén listas y así hacer realidad este megaparque solar, que durante su construcción, según recalca, conllevará la generación de entre 300 y 400 puestos de trabajo y, una vez en funcionamiento para su mantenimiento, se necesitarán entre 15 y 20 empleos locales; cifra, por cierto, similar a la del parque ‘Belinchón’ cuando esté en marcha.

El proyecto de este último parque fotovoltaico, a construir en Barajas de Melo, va un poco más retrasado, si bien ya se tiene prácticamente cerrado el contrato de venta de energía, por lo que el consejero delegado de Grenergy no duda en señalar que “por nuestra parte y a falta de las autorizaciones pertinentes, tendríamos todo listo para comenzar su construcción a principios de 2021”.

CARACTERÍSTICAS

El parque ‘Escuderos”, que toma su nombre de la subestación de Villanueva de los Escuderos donde se evacuará la energía generada, será una de los más grandes de España con una potencia máxima de 200 MW y una producción anual de 400 GWh; energía suficiente para suministrar electricidad a unos 125.000 hogares.

Ubicado en el paraje ‘Malpesa’ del municipio de Altarejos, este parque contará con un total de 540.360 paneles fotovoltaicos, ocupará una superficie total de 361 hectáreas y cuando entre en funcionamiento evitará la emisión de 259.350 toneladas de CO2 al año.

Cifras superiores a las del futuro parque ‘Belinchón, llamado así porque evacuará la energía generada a la subestación del citado municipio conquense. Esta infraestructura energética contará con un total de 374.976 paneles fotovoltaicos en una superficie de 266,54 hectáreas, una potencia máxima de 150 megavatios y una producción anual de 315 GWh, suficiente para suministrar electricidad a unos 90.000 hogares.

Ubicado en el paraje conocido como ‘Valdepocillas’, dentro del municipio de Barajas de Melo, conllevará una inversión comprendida entre los 85 y los 95 millones de euros y su puesta en marcha evitará la emisión anual de 194.512 toneladas de CO2.

Dos proyectos que vienen a reforzar el potencial de la provincia de Cuenca en la generación de energías renovables. Y es que su buena radiación, su altitud idónea para una excelente refrigeración de los paneles fotovoltaicos y la proximidad a infraestructuras de alta tensión para la evacuación de la energía generada han convertido estos dos emplazamientos en lugares idóneos para ubicar estos dos proyectos de esta importante empresa española, que cotiza en el mercado continuo, con una facturación de más de 100 millones de euros en 2019 y con presencia en seis países del mundo (España, Colombia, Perú, Chile, Argentina y México).