El Gobierno de Castilla-la Mancha ha acometido actuaciones en cinco carreteras de titularidad autonómica de la provincia de Cuenca con el objetivo de mejorar la adherencia para los momentos de inclemencias meteorológicas.
El delegado provincial de Fomento, José Ignacio Benito, ha visitado el tramo de la actuación en la CM-310 entre Saelices y Villamayor de Santiago junto a la alcaldesa de la localidad, Paloma Jiménez y el concejal Manuel Oliva.
Benito ha explicado que se ha actuado en 14 kilómetros de las carreteras CM-200, CM-2002, CM-220, CM-311 y CM-310, a los que se ha destinado un presupuesto de 195.000 euros.
Las actuaciones se han llevado a cabo para mejorar las características de rugosidad superficial del firme que se habían visto mermadas por el paso del tiempo, las acciones meteorológicas y la acción del tráfico, y conseguir una mejor adherencia en periodos de lluvias y otras inclemencias meteorológicas frecuentes en la provincia.
El delegado provincial de Fomento ha añadido que se planteó una intervención de conservación preventiva, consistente en el extendido de una mezcla bituminosa de tipo microaglomerado en frío y repintado de marcas viales con pintura termoplástica, de tal forma que “se ha recuperado la rugosidad superficial en aquellos tramos de carretera que lo necesitaban, mejorando en último término la seguridad vial de los usuarios, tal y como se perseguía”.
Para finalizar, José Ignacio Benito ha puesto de manifiesto el compromiso del Gobierno de Emiliano García-Page en materia de carreteras, lo que está suponiendo “importantes inversiones en la provincia de Cuenca”.
