Fresneda de Altarejos tiene censados apenas 45 habitantes aunque su asociación cultural llega hasta los 250 asociados. El colectivo, impulsado por la juventud del pueblo y que lleva trabajando desde 2018 para dinamizar la vida de la pequeña localidad, se ha aliado ahora con el Ayuntamiento para dar vida a ‘Fresneda en el Mapa’, un proyecto intergeneracional que busca convertirse en un referente cultural y de sostenibilidad en la comarca.
En el marco de esta iniciativa, el municipio acogía a finales de junio diversas actividades sostenibles y formativas que pretenden llevar hasta la España menos poblada iniciativas que por lo general no suelen llegar a estos municipios.
Entre ellas estaban el primer mercadillo de segunda mano o talleres de upcycling impartidos por varias costureras de la zona, que enseñaron cómo reaprovechar prendas dándoles nuevos usos.
También se pudo disfrutar de la exposición de fotografía de la joven Lucía Guijarro Álvarez –vecina de esta localidad–, así como del coloquio ‘Hablemos de IA’, de la mano de Paz de Torres y Felipe Gómez-Pallete, autores del libro Que los árboles no te impidan ver el bosque para acercar al público los retos y oportunidades de la inteligencia artificial en nuestra sociedad.
RESULTADOS
El presidente de la Asociación Cultural de Fresneda de Altarejos, Miguel Ángel Campos Llorente (26 años), pone el acento en que el colectivo quiere ofrecer oportunidades de ocio y culturales tanto a las personas que viven en la localidad como a los que regresan en ciertas fechas y a los habitantes de los pueblos de alrededor y que “puedan poner a Fresneda en el mapa”. “De hecho, la programación de actividades está pensada, más que para nosotros, para abrir las puertas a la comarca para que vean el fruto del trabajo que llevamos haciendo durante seis años”, subraya.
Un trabajo que arrancó en 2017 cuando, ante la falta de propuestas de ocio en las fiestas de la localidad para la juventud, un grupo de jóvenes decidió tomar la iniciativa y contrataron una charanga con fondos propios, más la colaboración de todo aquel que quiso contribuir. Y quedaron tan satisfechos con la acogida que al año siguiente se animaron a montar una asociación con el objetivo de organizar actividades más allá de las tradicionales verbenas nocturnas y las procesiones y “darle más vida” al pueblo.
Una vez consolidada la asociación, apostaron por organizar también actividades dinámicas dirigidas a los más pequeños como juegos de agua porque no había oferta para este sector. “Cuando nosotros éramos niños, había más cosas pero se habían ido perdiendo”, recuerda.
Desde entonces, cogieron las riendas de la organización de la programación de las fiestas, así como de otras actividades a lo largo del año. Torneos de fútbol, carreras populares, concursos de disfraces y campeonatos de lanzamiento de salami y de huesos de aceituna son algunos de los actos que se han impulsado en este tiempo desde la asociación, que también ayuda a recoger leña para la hoguera de San Antón, hace fiestas en Halloween y celebra el Año Nuevo en comunidad.
HACER COMUNIDAD
Porque precisamente las actividades que programan también buscan fomentar el “sentimiento de comunidad” de los habitantes de Fresneda de Altarejos y de los que tienen orígenes en este pueblo y regresan periódicamente a la localidad.
“La asociación fue evolucionando hasta que se hace imprescindible en el pueblo. La gente que viene en verano los apoya y aporta para que el colectivo siga adelante y creciendo”, destaca por su parte Irene del Rey Góngora, concejala de Fresneda de Altarejos.
Con estos mimbres, el Ayuntamiento ha decidido también “poner el foco” en esta asociación con el objetivo de fomentar más actividades en el municipio, con el fin de aspirar a convertirse también en referente para los pueblos de alrededor.
Tras las actividades realizadas en junio, la idea es organizar más actos a lo largo del año, entre ellas charlas mensuales. Por el momento, ya tienen cerrada para agosto una conferencia a manos de la investigadora Yolanda Fernández, que es originaria de Fresneda.
Aunque el gran reto de este proyecto en común entre el Ayuntamiento y la asociación es hacer frente al reto demográfico. Y parece que algo está cambiando en este sentido ya que en los últimos años han sido varios los jóvenes que han regresado a vivir al pueblo, entre ellos el propio Miguel y la fotógrafa Lucía Guijarro.
“Desde el Ayuntamiento debemos escuchar esa tendencia de vuelta a Fresneda”, aboga por su parte la concejala Del Rey Góngora.
