Educación 2.0 en tiempos del coronavirus

¿Cómo se están organizando los profesores en la provincia de Cuenca para seguir el ritmo de las clases tras la suspensión de la actividad lectiva el viernes pasado en toda la región a consecuencia del coronavirus? Papás 2.0 es una aplicación digital de la Consejería de Educación de Castilla-La Mancha que, entre otros servicios, cuenta con un Aula Virtual que ofrece a los docentes un espacio en el que interactuar con sus alumnos fuera de las clases y en especial para los cursos ofertados en modalidad a distancia. Pero está preparada para funcionar en condiciones normales, no para la avalancha de entradas de los últimos días.

El Gobierno regional ha tenido que habilitar otro espacio más con información sobre recursos educativos debido a la situación y ha recordado que también se pueden utilizar otras formas de comunicación con el alumnado, como el correo electrónico o los diferentes servicios de envío telemático que ofrecen los teléfonos móviles

Pilar Rojo Arias, profesora de Filosofía en el IES Alfonso VIII de Cuenca, piensa que esto puede ser una oportunidad “para llegar a los alumnos con su mismo lenguaje”. “No llegamos porque seguimos dando clases magistrales como en el siglo XIX” a unos chicos nacidos en la era digital.

“La Plataforma Papás 2.0 no está preparada para esta contingencia tan extraordinaria”, apunta la profesora, que el curso pasado se abrió un blog al que, reconoce, nunca dotó de contenido. Tras el anuncio del cierre de los centros educativos en la Comunidad de Madrid, ya empezó a prepararse para “teleclases” en caso de que la medida llegase también a Castilla-La Mancha, como sucedió finalmente.

Imparte clases en 1º y 4º de ESO, de Valores Éticos y Filosofía, respectivamente, y en 2º de Bachillerato, imparte Historia de la Filosofía. Estos últimos eran los que más le preocupaban por las pruebas de Evaluación para el Acceso a la Universidad (EvAU), aunque finalmente se han suspendido.

Para estos estudiantes dio este lunes una clase virtual a través de la plataforma Skype, aunque también estuvo barajando hacerlo por la plataforma Zoom. Pidió antes permiso a los padres porque, según la ley de protección de datos, no se debe tener el teléfono de los alumnos.

“Ha salido más o menos bien. Nos toca un tema difícil, probablemente el más duro, la epistemología de Kant. Pero lo lograremos”, se anima a sí misma. “Pero porque no son muchos alumnos. En una clase con 25 o 30, sería muy complicado”, señala.

A los de 1º y 4º de ESO, les ha mandado enlaces a través del blog a vídeos para que puedan seguir trabajando los contenidos programados en clase.

“Toca reinventarse. ¿Por qué no vamos a poder explicar a Nietsche en un vídeo a través de Youtube?”, bromea, aunque reconoce que todavía a ella le da un poco de vergúenza grabarse. “Esto es nuevo para todos. Me ha escrito un alumno en el blog pero no me ha puesto el nombre. Voy a contestarle para preguntarle. Estamos aprendiendo juntos”, señala.

Para esta docente, es la hora de buscar y compartir recursos educativos para que todos se puedan beneficiar del material preparado estos días. “Esta situación puede ayudar también a los alumnos a ser más autónomos. A trabajar la competencia de aprender a aprender, que es una de las más importantes”, añade.

Plan de trabajo virtual en el lES Cañada de la Encina de Iniesta

En el IES Cañada de La Encina, en Iniesta, también se han organizado para trabajar de forma telemática y que los alumnos continúen con el ritmo de las clases desde casa. En principio, se les dijo al equipo docente que lo harían a través de la plataforma Papás 2.0. “Pero ha colapsado”, dice Juan Francisco Blesa, el director del centro.

El viernes celebraron un claustro extraordinario para organizarse. Dentro de la propia web del instituto, han habilitado un espacio en el que los profesores están subiendo el plan de trabajo con las tareas que están planificando para estos días en todos los niveles educativos.

El director grabó un vídeo interno con instrucciones a los profesores para que establezcan su propio plan de trabajo, con las actividades, la plataforma a través de la que se trabajará y los plazos para desarrollar las tareas, procurando no agobiar tampoco al alumnado.

De todas formas, señala que en el centro se estaba trabajando ya desde hace unos años con Classroom, una especie de red social de Google en la que participan docentes y alumnos. “Lo hemos fomentado mucho”, indica.

Los alumnos de 2º de Bachillerato “están aún más nerviosos ahora por la EvAU”, una prueba que finalmente se ha pospuesto dadas las circunstancias. “Los profesores están muy encima de ellos, intentando también tranquilizarlos”, asegura.

Grupo de difusión en el CRA Ojos de Moya de Landete

En el Colegio Rural Agrupado (CRA) Ojos de Moya, de Landete, también celebraron el viernes un claustro extraordinario, con el problema añadido de que el equipo docente está repartido por las secciones de los distintos municipios que conforman este centro educativo.

Juanjo Herráiz da clases en primero de Primaria, a niños de seis y siete años. Ya tenía un grupo de difusión a través de WhatsApp con los padres y lo está utilizando para comunicarse estos días con las familias y establecer tareas para los alumnos para estos, al menos, 15 días. "Hay muchas posibilidades. Hay muchas Apps educativas que pueden servir este tiempo", cuenta.

Este lunes, el maestro grabó un vídeo con su móvil en el patio de su casa para los alumnos. "Hola, chicos. ¿Cómo estáis? Hoy es un día especial. Estamos todos en casa pero no dejaremos de trabajar", comenzaba diciendo el docente, para continuar luego con lo que hacen todos los días al empezar la clase, decir la fecha y el tiempo -que el lunes era lluvioso y amenazaba nieve-, para que fuera lo más parecido posible a lo que hacen habitualmente.

Además, les explicó lo que les tocaba hacer del cuadernillo. El lunes había que trabajar Lengua y Matemáticas.

“Como es un grupo cerrado, entre nosotros también nos mandamos fotos. Por ejemplo, compartimos los dibujos que hacen. Es muy importante que los niños no se sientan solos en su casa, que vean que estamos todos juntos en esto”, subraya. Al ser un CRA, son como una pequeña familia y ya se están echando de menos.