La legionella es uno de los peligros típicos del verano con la llegada del buen tiempo que puebla las piscinas municipales. Con el fin de evitar esta bacteria ambiental, así como las distintas plagas, la Diputación de Cuenca ayudará a 125 piscinas pertenecientes a 120 ayuntamientos conquenses a controlar estas adversidades. Con un presupuesto de 20.000 euros para este cometido, realizará la prestación de este servicio mediante la contratación con una empresa externa acreditada y autorizada para el ejercicio de dicha actividad, por lo que los ayuntamientos no tendrán que hacer ningún desembolso.
La diputada de Asistencia Técnica a Entidades Locales, Nuria Illana, ha destacado la importancia de que los consistorios puedan delegar este importante mantenimiento en personal especializado para garantizar así que los bañistas pueden hacer uso de esta infraestructura municipal “en las mejores condiciones posibles”.
El servicio a prestar por la Diputación a los ayuntamientos beneficiarios de esta convocatoria en sus piscinas, incluye: hipercloración del sistema en todo el recinto de la piscina desde la entrada de agua fría, instalación de un punto de inyección que permita realizar la hipercloración, el tratamiento de termos de agua caliente y duchas mediante un procedimiento químico por hipercloración o térmico por temperatura, control de plagas en todas las zonas del recinto de la piscina y desinfección de elementos fijos y desmontables.
Con esta subvención, la Diputación Provincial pone a disposición de los ayuntamientos este servicio para ayudar a cumplir con la normativa que regula el funcionamiento de las piscinas de carácter público.