La digitalización, un filón para la empleabilidad de la mujer rural

El mundo rural no solo es sector agropecuario. “La incorporación femenina al campo es un hecho y cada vez son más pero las mujeres no están solo en este ámbito. Hoy en día, con la fibra, que está llegando a la gran inmensidad de los pueblos de Cuenca y de la región de Castilla-La Mancha y con el comercio digital, se ha abierto una ventana al mundo a través de la cual toda persona puede poner en marcha un negocio en cualquier sitio y vender a otras partes, lo que puede ser una pieza clave para asentar a las mujeres y, en defintivia, población en la provincia”, reflexiona el delegado provincial de Economía, Empresas y Empleo, Óscar Martínez. 

Conscientes de la necesidad de formar en este ámbito en los pueblos, especialmente a las mujeres, que se ven más afectadas por el desempleo, el Gobierno de Castilla-La Mancha va a instruir en competencias digitales a cerca de un millar de féminas de entornos rurales de la provincia de Cuenca con el fin de mejorar su empleabilidad y facilitar su inserción laboral. En toda la región, se llegará a 12.000, con una inversión total que supera los 6,6 millones de euros.

Tres líneas de formación

La provincia de Cuenca va a ser la primera que va a poner en marcha en la región este programa, que está previsto que arranque “en las próximas semanas”, explica el responsable provincial de esta área, quien detalla que habrá tres líneas de formación: en competencias básicas y avanzadas y una tercera sobre comercio digital.

Este programa, que ya ha sido adjudicado a una unión temporal (UTE) de centros de formación,  se prolongaría hasta septiembre de 2023 aunque habría un seguimiento de tres meses de las alumnas participantes por lo que llegaría hasta diciembre. “Este plan de formación en competencias digitales es muy importante para la provincia de Cuenca, eminentemente rural”, considera.

Además de este programa, el Ejecutivo autonómico también está trabajando en otro plan de apoyo laboral para mujeres aunque se dirige tanto a las de entornos rurales como urbanos. En este caso, las participantes van a seguir itinerarios individualizados que conllevan acciones de diferente naturaleza como orientación laboral, asesoramiento, información sobre el ámbito del trabajo, formación, adquisición de competencias y habilidades transversales, facilitación de la inserción laboral y acompañamiento en el empleo. “El objetivo es fortalecer la igualdad en el acceso al empleo”, apunta. 

Seis entidades sin ánimo de lucro van a desarrollar en la región este programa, que llegará a las cinco oficinas de empleo de la provincia de Cuenca (Cuenca, Tarancón, Motilla del Palancar, Belmonte y Cañete). Tendrá doce meses de duración, así como un periodo de seguimiento. Cuando finalicen el itinerario, las mujeres van a ser remuneradas con una ayuda de 515 euros. Además, la organización promotora tiene la obligación de insertar al menos a un 20% de las participantes.

El delegado del área anima a las conquenses de entornos rurales a pedir información sobre estos programas en las oficinas públicas de empleo y a apuntarse a ellos.

Una inserción laboral que es clave para asentar a las mujeres en los municipios, tal y como señalan desde la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (Fademur) de Castilla-La Mancha. Y ponen un ejemplo: “En el éxodo de los años sesenta y setenta en España a otros países europeos, cuando se iban los hombres, regresaban. Cuando se marchaban ellas, no volvía nadie. Por eso es tan importante fijar a la mujer en los pueblos”, indican desde el colectivo. 

De cara al Día de la Mujer Rural, que se celebra este 15 de octubre, el colectivo señala que la promoción de la titularidad compartida de las explotaciones agrarias, la digitalización, los incentivos para vivir en los pueblos como los que promueve la Ley de Medidas contra la Despoblación de Castilla-La Mancha, la lucha contra la violencia de género –más acusada en el medio rural– son algunas de las cuestiones que preocupan a esta federación, que considera que el papel de las mujeres “es crucial” para la supervivencia de las pequeñas localidades.              

Otro de los problemas para las familias de los pueblos es la conciliación laboral y personal, que se complica todavía más en los municipios más pequeños ya que no disponen de tantos recursos y servicios como las poblaciones más grandes. Una de las herramientas públicas para contrarrestar este problema y ayudar con el cuidado de los menores de 14 años es el Plan Corresponsables, recuerda la delegada provincial de Igualdad, Lourdes Luna. “Donde mejor ha funcionado y más demanda ha habido ha sido en el mundo rural. En un pueblo con cinco o seis menores no tienen la cobertura de una escuela infantil. Como no era necesario un número de niños ni de horas, es donde mejor ha resultado”, añade.

Un total de 2.157 familias conquenses se beneficiaron del I Plan Corresponsables, que llegó a 137 poblaciones que pusieron en marcha ludotecas y aulas matinales, entre otros recursos. La Junta va a destinar ahora 2,2 millones de euros en la provincia a la nueva edición, que beneficiará a 141 localidades. Una de las novedades es que se amplía la edad hasta los 16 años. El objetivo es ayudar a los hogares con niños aunque, en la práctica, apoya más las mujeres, que es sobre las que suele recaer el cuidado de los hijos.