El número de defunciones registradas en la primera mitad del año - entre enero y junio- en la provincia de Cuenca prácticamente duplicaron al de nacimientos, pues mientras que éstos se situaron en 652, los fallecidos alcanzaron la cifra de 1.251.
Una tendencia que no es nueva ni mucho menos, pues es la constante que arroja los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) desde el año 2000, fecha desde la que siempre el saldo entre defunciones y nacimientos ha sido negativ, acentuándose aún más a partir del año 2012.
En todo este período han fallecido 43.060 personas, mientras que únicamente han nacido 30.152, lo que supone que las defunciones han superado a los alumbramientos en más de un 42 por ciento.
Preocupación en la CEOE
Para la Confederación de Empresarios de Cuenca esta tendencia es "preocupante", puesto que ahondan en el problema de despoblación y envejecimiento que sufra la provincia. Por ello, vuelve a pedir que se establezcan medidas que permitan a los jóvenes permanecer en nuestra provincia y revertir esta situación.