A veces la realidad supera con creces a la ficción y si no tan solo hay que echar un vistazo al V Barómetro del Fraude al Seguro de Auto y Hogar de Línea Directa, que acaba de hacerse público hace unos días. Y es que entre los fraudes detectados por esta aseguradora en los años 2017 y 2018 –periodo al que hace referencia este reciente estudio– se encuentran desde supuestos arañazos en coches realizados con tiza a “chinazos” en la luna que realmente son un celo pegado por dentro del cristal, pasando por clientes que reclaman padecer un miedo insuperable a conducir tras un siniestro y, sin embargo, son grabados saltándose un semáforo en rojo o enviar una foto al seguro de un inodoro con una visible grieta en la tapa, que en verdad es un hilo.
Está claro que la picaresca en nuestro país sigue muy vigente hasta el punto de que 5,6 de cada 100 siniestros declarados son un intento de fraude al seguro. Una situación que no es ajena a Cuenca y, de hecho, nuestra provincia, con un 6,6 por ciento, se sitúa entre las que más fraudes entre particulares se han detectado entre los años 2017 y 2018. Porcentaje con el que encabeza el ránking regional, puesto que las otras cuatro provincias se encuentran por debajo de la media nacional; en concreto, Ciudad Real y Toledo, con un 5,1%; Albacete, con un 5; y Guadalajara, con un 4.
Otra cuestión es el ránking nacional, que está encabezado por la provincia de Jaén, con un 8,2% de fraudes, seguida de Sevilla, con un 7,8 y la Región de Murcia, con un 7,6 por ciento.
COSTES DEL FRAUDE
En el caso concreto de los seguros de auto, el coste de estos fraudes en nuestro país, según este V Barómetro de Línea Directa, se eleva en el citado periodo por encima de los 800 millones de euros, que supera los 9.200 millones si hablamos de la última década, lo que equivale al 0,8% del Producto Interior Bruto de España en 2018.
En el ámbito del fraude entre particulares, el coste medio por fraude se elevaría a los 1.296 euros, cerca del 1 por ciento más que en el estudio anterior. Y si hablamos de los intentos de engaño más comunes, cabe mencionar dentro de los daños materiales el parte de daños ajenos al siniestro, con un 85 por ciento, y, dentro de los daños corporales, el simular lesiones o pretender agravar las ya existentes, con un 99,8%.
Cifras que nada tienen que ver en volumen con el fraude registrado en los seguros del hogar, puesto que alcanzan los 166,2 millones de euros, con un coste medio por parte falso de 777 euros.
MAFIAS
Un detalle más preocupante, si cabe, es el hecho de que gran parte de estos fraudes son cometidos por mafias especializadas. De hecho, este estudio pone de manifiesto que se han triplicado desde 2013 hasta el punto de contabilizar en los últimos seis años, nada más y nada menos, que 500, especialmente en 2018. La Región de Murcia, Cantabria, Andalucía, y País Vasco concentran el mayor número de organizaciones de este tipo al contar con más de 5 por millón de habitantes. En Castilla-La Mancha, sin embargo, se estima en una por cada millón.
PERFIL DEL DEFRAUDADOR DE SEGUROS
Los jóvenes, con edades comprendidas entre los 18 y los 24 años, desempleados o con trabajos precarios son los asegurados que más intentan engañar a su seguro de auto y hogar, aunque también sean dignos de mención los hombres de mediana edad (40 años), profesionales y con formación universitaria. Del mismo modo, los miércoles y los jueves son los días preferidos para cometer las estafas, así como los meses de marzo, abril y mayo.
