Como era de esperar, los efectos de la pandemia de la Covid-19 se están haciendo notar en el turismo, pero, más si cabe, en los establecimientos hoteleros, que han visto cómo ha descendido el número de turistas que han optado por este tipo de alojamiento a la hora de visitar Cuenca y provincia durante el pasado mes de julio. Al menos, así se desprende de los datos de la última Encuesta de Ocupación Hotelera (EOH) publicada esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE) que estima en 17.241 el número de viajeros que han pasado por nuestra provincia a lo largo de julio, lo que supone un descenso del 39,04 por ciento con respecto al mismo mes del año pasado, cuando esta cifra se elevó a 28.285.
Comportamiento similar al experimentado por las pernoctaciones en establecimientos hoteleros que también han descendido hasta las 32.306; un 38,6% menos que en julio de 2019, cuando se alcanzaron las 52.660. Un descenso en el que también ha influido el hecho de que en este periodo hayan permanecido cerrados al público un total de 26 hoteles, lo que supone un descenso del 17,6% del total, estimado en 147 establecimientos.
Menos establecimientos abiertos que, por consiguiente, han supuesto una reducción de la oferta de habitaciones, que ha pasado de las 2.705 habituales a las actuales 2.235, lo que equivale a una reducción del 17,3%. Algo que en número de plazas hoteleras se ha traducido en 918 menos que en el mismo periodo del año anterior; es decir, una reducción del 17,2 por ciento, al pasar de las 5.320 del año pasado a las 4.402 de este mes de julio. Aun así la ocupación media en los hoteles de nuestra provincia se ha situado en el 28,12%, mientras que hacía un año esta cifra se elevaba al 33,65; es decir se ha registrado una reducción del 5%.
CUENCA CAPITAL
El panorama en la capital conquense no ha sido muy distinto y los descensos han sido generalizados en todos los conceptos. Así, por ejemplo, el número de viajeros durante julio se ha reducido hasta los 9.530, lo que representa una caída del 55,4 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior, cuando se elevaron a 17.018. Un volumen de viajeros en la capital que equivale a algo más de la mitad (55%) del total registrado en toda la provincia.
Las pernoctaciones, por su parte, que han ascendido a 18.527, han registrado una disminución del 46,2 por ciento, puesto que se han contabilizado 15.949 menos que en julio de 2019. Eso sí, también hay que tener en cuenta que han abierto 8 hoteles menos y, en consecuencia, había disponibles un 23,5 por ciento menos de habitaciones, que han pasado de las habituales 1.038 a 794. lo que en número de plazas hoteleras se ha traducido en un descenso de 493 hasta llegar a las 1.625, siempre según la citada Encuesta de Ocupación Hotelera.
El grado de ocupación media, por otro lado, se ha situado en la capital en el 40,04 por ciento, mientras que el año anterior se elevó al 53,22; es decir, 13 puntos menos.
CASTILLA-LA MANCHA
Las cosas no han sido muy distintas a nivel de Castilla-La Mancha, donde se ha experimentado un descenso del número de viajeros del 48,4 por ciento, puesto que en este mes de julio decidieron visitar nuestra región 104.587 turistas, mientras que hace un año esta cifra ascendió a los 203.037. Y en pernoctaciones, más de lo mismo. Se han contabilizado 183.139, lo que equivale a un descenso del 46,2% con respecto al año anterior, cuando se alcanzaron las 343.238.
