Un año más, el servicio de comedor escolar permanece abierto durante el periodo estival en varios centros de la provincia de Cuenca gracias a los convenios suscritos entre el Gobierno de Castilla-La Mancha y los respectivos ayuntamientos. Aunque el número va fluctuando dependiendo del día, este recurso está beneficiando en estos momentos alrededor de 65 alumnos y alumnas procedentes de familias vulnerables.
En concreto, en la provincia de Cuenca, los comedores escolares están funcionando en Cuenca, Mota del Cuervo y San Clemente. En el caso de la capital conquense, el servicio se presta en los colegios de Santa Ana, San Fernando y Fuente del Oro, aprovechando que estos centros educativos permanecen abiertos durante estas fechas por las Escuelas de Verano.
Alrededor de cuarenta escolares de media están haciendo uso de este recurso este verano en la ciudad de Cuenca mientras que en San Clemente se está en torno a la decena de usuarios y en Mota del Cuervo, el número oscila entre diez y quince escolares cada jornada, según detalla el delegado provincial de Educación, Gustavo Martínez. Dependiendo de la situación económica familiar, el menú está subvencionado en su totalidad o al 50% por el Ejecutivo de Castilla-La Mancha.
TRES VECES AL AÑO
El responsable, que hace hincapié en que esta iniciativa busca dar cobertura a los hogares con menos recursos al tiempo que se facilita la conciliación, recuerda que este servicio también se ofrece en los periodos vacacionales de Navidad y de Semana Santa.
Durante esos dos periodos no lectivos, el alumnado se lleva el menú a sus casas dado que los centros educativos no están abiertos en esas fechas mientras que durante las vacaciones estivales, las familias tienen dos opciones en el caso de Cuenca capital: bien pueden retirar la comida para llevarla a sus hogares o bien los menores pueden quedarse en el comedor escolar dado que el recurso está en funcionamiento por las Escuelas de Verano –el comedor en este último caso está más enfocado a la conciliación, aunque los precios son también bajos–.
“Tenemos interés en firmar estos convenios con la Junta para mantener el comedor también en los periodos no lectivos porque hay casos de familias en las que este menú es la única comida que tienen sus hijos al día”, explica el concejal de Educación del Ayuntamiento conquense, Víctor Manuel Fernández.
Con el fin de planificar el número de menús que las empresas adjudicatarias deben preparar cada jornada y evitar el despilfarro de comida, las familias deben avisar con dos días de antelación si van a hacer uso del servicio.
CONJUNTO REGIONAL
En el conjunto regional, los comedores escolares de verano benefician a más de 6.800 escolares de 29 municipios de Castilla-La Mancha fruto de los convenios entre la Consejería de Educación y varios ayuntamientos. Del total de alumnos que pueden utilizar este recurso, 4.731 tendrán una beca que cubre la totalidad del servicio y a 2.075 se les financia el 50 por ciento.
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