El mundo del motor nos deja cada año nuevos avances significativos en los modelos que salen al mercado: coches con 2.000 CV de potencia, puertas que se abren con la huella del dedo o vehículos que pasan de 0 a 100 km/h sin que te de tiempo a sintonizar la radio.
Sin embargo, y a pesar de todos los avances, poco pueden competir con la elegancia y el encanto de un coche clásico: cristales a manivela, transistores con interferencias y una mecánica sencilla pero eficaz.
Vicente Valladolid, vecino de Santa María del Campo Rus, comenzó a coleccionar vehículos clásicos en los años 80 y, a día de hoy, cuenta con 34 modelos.
“El primero que me compré fue un Porche 944s y a raíz de entonces me acerqué cada vez más a este mundo. Finalmente fui buscando piezas exclusivas debido a mi gusto deportivo sobre todo”, comenta Vicente, que recuerda su última concentración en Camarma de Esteruelas (Madrid), donde con su Mustang Mach 1 de 1972 ha conseguido el premio al coche más deportivo. “Es un coche original cien por cien y precioso. Le tengo mucho cariño”.
“Tengo un coche de 94 años al que llamamos ‘el abuelo’ y dos Jeep Willys empleados por los americanos en la II Guerra Mundial"COCHES CON CASI 100 AÑOS
La entrada en vigor de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial de 2016 hizo constatar que, para ser considerado un modelo clásico, debían de superarse los 30 años desde su primera matriculación. Esto no supone un problema para Vicente, ya que todos sus vehículos superan esta edad.
“Tengo vehículos de más de 40 y 50 años. Incluso tengo un Ford A de Doble Rueda que le llamamos el abuelo, porque tiene 94 años”, afirma. Entre sus piezas más preciadas también destacan dos Jeep Willys pertenecientes a las tropas americanas en la II Guerra Mundial, “de morro bajo y siete parrillas. Son piezas únicas”, o un Citroën B11 del año 1951, “es el que más utilizo para hacer bodas”, afirma.
Vicente es un fiel participante de concentraciones de coches clásicos no solo en Castilla-La Mancha, “también voy a Galicia, Baleares, Madrid y hago la zona de Andalucía”. Además, alquila sus vehículos para bodas y festejos e incluso algunos modelos han participado “en pequeños spots publicitarios y en cortometrajes de películas. Son muy llamativos”, señala.
Añade que “es habitual que la gente que te vea con estos coches al final te busque para bodas de familiares, sesiones de fotos e incluso para actividades en las ferias del pueblo”.
ADQUISICIÓN DE COCHES
Solo en España se calcula que actualmente hay cerca de 4,5 millones de vehículos clásicos, una cifra que ha ido creciendo progresivamente a pesar de la dificultad para encontrar estas piezas irrepetibles.
“Cuesta encontrarlos. La mayoría de las veces las compras y ventas surgen en las concentraciones. Siempre que vas te encuentras con amigos y te enteras de quién vende o quién compra. También con internet ahora es más fácil”, afirma Vicente, que de momento no tiene previsto seguir aumentando la colección, aunque “siempre hay alguna cosita que surge. Ver una pieza que te gusta y que no tienes es casi un delito. Pero de momento me voy a quedar con los que tengo”, ya que se trata de una colección “de un valor incalculable”.
FUNCIONAMIENTO
El tiempo no ha pasado por estos vehículos ya que todos los modelos de Vicente continúan en pleno funcionamiento. “Funcionan todos y muy bien, no hay ningún problema. Yo los utilizo también para viajar”.
En cuanto al mantenimiento, las equipaciones sencillas y unos motores básicos permiten la rápida reparación de sus piezas. “Del mantenimiento me encargo yo, porque al final terminas entendiendo de estas cosas. No tienen, como los coches de ahora, sistemas tan complicados”. afirma el dueño.
Después de 40 años de colección, Vicente los considera “unos hijos más” y “es difícil decantarse por uno” ya que todos tienen “su encanto. Los miras y todos te gustan”.
En cuanto a los vecinos del municipio conquense, están encantados con su numeroso catálogo de vehículos: “Ya me conocen como Vicente el de los coches”. En algunas ocasiones, de cara a las concentraciones, Vicente y su familia sacan a relucir varios coches y los vecinos de Santa Maria del Campo Rus “salen a la puerta de sus casas a vernos pasar”.
Y es que la colección de Vicente Valladolid es una muestra del amor por los modelos clásicos.
“Los vecinos me conocen como Vicente, el chico de los coches. Están encantados”
COCHES DE PELÍCULA
Estos modelos han llegado a pasar de ser una pieza ornamental de películas de cine a convertirse en verdaderos protagonistas. Un ejemplo de ello es el Ford Mustang Mach 1, que permitió a Sean Connery escapar de la policía en Diamantes para la Eternidad o a Nicolas Cage completar su lista de robos de coches en 60 Segundos.
Ni que decir tiene el papel del Seat 600 en el cine clásico español, albergando eternos viajes familiares hasta la costa en películas como Ya Tenemos Coche y series como Cuéntame. O el conocido 2 caballos, con el que Sor Citroën sembraba el caos por las calles.
