Los últimos pasos de Jorge Manrique
Un monolito construido en 1941 con piedra perteneciente al Giraldo de la Catedral de Cuenca, por iniciativa de Federico Muelas, recuerda el lugar en el que, el 24 de abril de 1479, caía herido mortalmente el poeta Jorge Manrique en la localidad de Castillo de Garcimuñoz.
Situado a unos tres kilómetros del núcleo urbano, en el camino de la Nava, tiene dos escudos en cada lado y una cruz central de hierro. En el pie del monolito, ya solo queda el hueco destinado a una arqueta en la que se encontraban las coplas de Jorge Manrique, entre ellas las famosas 'A la Muerte de su Padre'.
La importancia histórica de este enclave es motivo de visita de muchos turistas, por lo que el Ayuntamiento de Castillo de Garcimuñoz, gracias a la ayuda económica de Diputación, ha acometido la restauración y puesta en valor de la cruz, así como una limpieza de la piedra, la mejora de las escaleras y el cambio de los bolardos que rodean al monolito.
Además, se han incluido unos versos en la roca que son obra de un herrero local y que se complementan con una panel explicativo.
El diputado de Patrimonio, Miguel Ángel Valero, que ha visitado esta intervención junto al teniente alcalde, Miguel Ángel Castillo, ha destacado que la historia de Castillo de Garcimuñoz está ligada ineludiblemente a Jorge Manrique, "un filón que debemos aprovechar” y para lo que "es importante que el monumento se encuentre en el mejor estado posible".
Valero ha manifestado que esta cruz complementa un “ya de por sí rico patrimonio" en este municipio, que tiene como principal atractivo el propio castillo que perteneció a un caballero que acompañó al rey Alfonso VIII en su conquista de Cuenca y que perteneció a prohombres como el infante Don Juan Manuel o Juan Pacheco.
La Institución provincial está llevando a cabo otras inversiones en el municipio de Castillo de Garcimuñoz como la inversión que se llevará a cabo a través del Plan de Obras y Servicios Bienal que con un importe de 42.000 euros actuará en el camino del cementerio.