El Comité de Empresas del Servicio Provincial de Bomberos de la Diputación ha vuelto a denunciar el elevado tiempo de respuesta que, en muchas situaciones, tienen a la hora de atender una emergencia.
En esta ocasión ha sido con motivo del accidente de tráfico ocurrido este lunes en el término municipal de Beteta, donde el conductor de un camión tuvo que ser rescatado tras quedar suspendido de un precipio en una zona escarpada al salirse de la vía a la altura del kilómetro 45 de la CM-210. La cabeza tractora quedaba suspendida en el aire, sujeta por la carga del camión, a una altura de 45 metros.
Desde el Comité de Empresa señalan que, tras recibir el aviso sobre las 11.15 horas, una dotación completa salía desde el parque de bomberos de Tarancón hacia el lugar del siniestro.
140 kilómetros de distancia y aproximadamente 1 hora y 40 minutos de trayecto para intentar salvar la vida de este conductor que, aclaran, no fue rescatado por los bomberos, sino por un albañil de la zona junto con un Guardia Civil y un operario de carreteras. "Más de una hora de trabajo y arriesgando su propia vida", insisten desde el Comité de Empresa.
Además, en un comunicado, subrayan que durante el tiempo que la dotación al completo de Tarancón estuvo yendo hacia el siniestro, la población de Tarancón y alrededores - unos 70 kilómetros de la autovía A-3- estuvieron "completamente desprotegidas".
Por ello, consideran "inadmisible" que haya grandes zonas y áreas de la provinica de Cuenca que queden en esta situación y que "se siga dividiendo a la población en ciudadanos de primera y segunda categoría". "Ninguna vida vale mas que otra", insisten.
Del mismo modo, acusan al Equipo de Gobierno de la Diputación de negarse a abrir un parque de bomberos en la Serranía por falta de población, como se puso de manifiesto en el pleno provincial del pasado 28 de diciembre; mientras "quieren promocionar turísticamente una zona, que carece de unos servicios mínimos de protección ciudadana".
Por todo ello, exigen a los responsables políticos que tomen medidas "urgentes" ante una problemática que viene ya exigiéndoseles desde hace casi una década.