Los productores de cereal de la provincia de Cuenca tienen puestas muchas esperanzas en el buen resultado de la campaña de este año, que se ha venido desarrollando con normalidad.
Desde Asaja Cuenca, su secretario general, Manuel Torrero, habla de buenas perspectivas de cosecha para este año, a tenor de las excelentes condiciones climatológicas que se vienen registrando hasta ahora, salvo algunas excepciones a consecuencia de fuertes tormentas muy localizadas.
Y es que la inmejorable primavera, tanto en precipitaciones como en temperaturas, unida a la buena nascencia registrada gracias a un invierno suave sin temperaturas muy extremas, está permitiendo que el cultivo del cereal esté creciendo en muy buenas condiciones y, además, de manera muy homogénea y uniforme en toda la provincia, sobre todo por el hecho de que no se hayan registrado golpes de calor que pudieran haber afectado al estado fisiológico de la planta.
La superficie destinada este año al cultivo del cereal ha aumentado ligeramente con respecto a la campaña anterior hasta llegar a las 340.000 hectáreas, lo que hace pensar a la citada organización agraria que la producción final vaya a rondar los 1,4 millones de toneladas, eso sí, siempre que no se registren incidencias de consideración y todo vaya según lo previsto.
En cuanto a la cebada, de la que nuestra provincia es la mayor productora de España, se han sembrado entre 270.000 y 275.000 hectáreas, lo que representa en torno al 80 por ciento de la superficie destinada este año al cereal en nuestra provincia.
Cifras que, unidas a la estimación de Asaja de un rendimiento medio por hectárea de entre 3.500 y 3.800 kilos, hacen prever una producción final que ronde 1.100.000 toneladas de cebada.
Los precios del cereal a estas alturas de la campaña, tal y como detalla Torrero, “están muy contenidos y con repuntes a la baja” en clara respuesta a las actuales buenas perspectivas de cosecha, que hacen presagiar que haya oferta suficiente para cubrir con creces la demanda del mercado; algo lógico y previsible. Otra cosa bien distinta es cuál va a ser el precio del cereal en el momento de la cosecha, a finales de junio y principios de julio.
En este sentido, el secretario general de Asaja Cuenca espera que “todo vaya bien y que no se produzcan incidencias que pongan en peligro esta buena cosecha, sin olvidar, por supuesto, que finalmente haya un buen ajuste entre oferta y demanda y se fijen precios adecuados y justos, que hagan rentables las explotaciones”.
