"Estamos totalmente hundidos. Hemos tenido que volver a empezar a limpiar desde cero". Estas son las palabras del teniente de alcalde de Buenache de Alarcón, José Javier Navarro, tras la tormenta de este lunes que volvió a anegar la parte baja de la localidad de barro y lodo.
El municipio, epicentro del paso de la DANA por la provincia de Cuenca que ha sufrido dos fuertes trombas de agua en apenas 72 horas, está sumido en las tareas de limpieza para intentar devolver las calles y viviendas a su estado normal. Aunque será difícil y costará tiempo. “No nos esperábamos la tormenta de ayer, ya habíamos avanzado en la limpieza y, aunque las ganas y los ánimos van mermando, tenemos que tirar hacia delante”, ha señalado.
Un día más, y ya van tres, los vecinos y vecinas se afanan en achicar agua de sus viviendas y evacuar el barro hasta las afueras de la localidad con ayuda de carretillas elevadoras, tractores y camiones que no paran de transitar por las calles más afectadas: Cura, Agua, San Miguel, Nueva, San Sebastián e Isabel I, localizadas todas en la parte baja del pueblo.
La realidad es que montañas de barro han anegado el pueblo, decenas de vehículos fueron arrastrados por las riadas –algunos hasta quedar dentro del cauce del río, boca arriba–, varios muros de viviendas y patios han caído por la presión del agua y las puertas de cochera están totalmente abombadas al no haber podido soportar la fuerza de las riadas que se formaron. Los destrozos, por ahora, son incalculables puesto que muchas familias lo han perdido todo.
Muebles, electrodomésticos, utensilios de labranza y demás enseres personales han quedado inservibles para decenas de familias que se han visto obligadas a tirarlo todo. Por las calles se ven desfilar tractores cargados con todo ello y familias enteras empleando hidrolimpiadoras para sacar de las paredes y suelos la acumulación de tierra y las marcas de la catástrofe. En algunos casos, las marcas de agua dentro de los domicilios llegan hasta los 3 metros de altura.
Es por ello que hasta 13 personas están viviendo en la Vivienda tutelada de la localidad puesto que no pueden acceder a su vivienda y gracias al apoyo de poblaciones vecinas y voluntarios de Cruz Roja tienen todo lo que necesitan.
COLEGIO Y CONSULTORIO MÉDICO
Además, el colegio y el consultorio médico local han quedado completamente destrozados. Joaquín Ramos, trabajador de limpieza del Sescam, se afana este martes en eliminar por completo el barro del centro médico, pero en la entrada se acumulan camillas, sillas, material de curas, ordenadores y los bancos de la sala de espera. Todo ello inservible. Si bien, afortunadamente parte de la aparatología ha podido salvarse. En el colegio, cinco trabajadores de Tragsa, un encargado y un maquinista están llevando a cabo las mismas tareas.
Las atenciones médicas se han trasladado a las dependecias del Ayuntamiento y las clases comenzarán el próximo lunes 11 de septiembre en la Casa de la Cultura, tal y como ya se avazó este lunes.
La delegada de la Junta en Cuenca, María Ángeles López, se ha desplazado hasta la localidad junto al presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana, para volver a evaluar daños y poner a disposición de Buenache todos los recursos posibles. En estos momentos están trabajando 17 efectivos del Plan Infocam. Entre ellos está "la doble de La Almarcha, el retén y la autobomba de Almodovar del Pinar, y la nodriza de Cardenete", ha señalado a preguntas de los medios de comunicación. A parte, también están participado en las tareas de limpieza las brigadas de obras públicas, que abrieron paso por las calles anegadas, el Servicio de Protección Ciudadan y las agrupaciones de Protección Civil. Toda ayuda es poca ante un desastre de tal magnitud.
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