Hasta los seis años Asela Asensi solo tenía el 40 por ciento de audición por el oído derecho y nada por el izquierdo. A sus padres les preguntaron siendo aún un bebé si querían que hablara por signos o que hablara. No tuvieron duda. Comenzaron a ir a logopedas, a seguir el trabajo en casa, con constancia, con el objetivo de que su hija estuviera totalmente integrada y de que su discapacidad no fuera nunca un problema para ella. Lo consiguieron y de qué manera.
Asela, con 15 años, cursa 4º de la ESO en el IES ‘Diego Jesús Jiménez’ de Priego y su brillante expediente académico, unido a su talento y a su capacidad de superación, le han hecho merecedora de otro de los galardones del Día de la Enseñanza que concede el Gobierno de Castilla-La Mancha.
Fue a los seis años cuando se sometió a una operación para colocarle un implante de conducción ósea, el llamado Baha. Este sistema utiliza la capacidad natural del cuerpo para conducir sonido a través del hueso, y puede lograr un impacto positivo e inmediato en la manera de oír y comunicarse.
“A partir de la intervención no he tenido ningún problema, hago una vida normal”, señala la joven para quien el premio “es una alegría, un orgullo que te impulsa a seguir y que te hace sentir que lo haces bien”. “Nunca me ha resultado un handicap ser sorda, todos a mi alrededor lo saben y jamás ha sido un obstáculo”, subraya. Por eso, espera que este reconocimiento sirva como acicate para otros chicos o chicas con alguna discapacidad. “Les animo a que sigan adelante, que no se rindan y que se esfuercen lo máximo posible, porque nos podemos sobreponer a cualquier dificultad”. Asela se ha convertido en un ejemplo y un referente para sus compañeros. En el aula, escucha perfectamente gracias al aparato que lleva y que maneja a través de un iphone y que le permite ajustar el volumen. Al principio despertó la curiosidad de algunos alumnos “pero yo les explico todo y acaba siendo algo del día a día”.
Sus materias preferidas son la Literatura y los idiomas y hacia ahí quiere orientar su futuro. De momento, no le va nada mal. Lleva un 9,68 de media en los tres primeros cursos de la Secundaria Obligatoria. “Siempre me ha gustado estudiar y sobre todo leer mucho”.
Un mérito que es solo de ella, de su esfuerzo, pero que comparte con su familia. “Su apoyo para conseguir hablar y oír bien ha sido fundamental”.
