España emprende un viaje pionero en la Serranía de Cuenca. El parque natural de la provincia ha sido elegido como uno de los puntos nacionales en los que llevar a la práctica medidas de acción que restauren su naturaleza.
El proyecto ‘Iberian Highlands’ de Rewilding Europe, una entidad nacida en Holanda en 2011, pretende dar respuesta a la actual emergencia planetaria en el viejo continente. España se suma a la red de territorios, que alcanza ya 10 áreas en Europa. Cuenca encabeza junto a Teruel y Guadalajara este sendero hacia la mejora del ecosistema. La iniciativa está en fase de arranque en La Serranía y se tiene previsto comenzar con las contrataciones de vecinos de la zona en el año 2024. Pablo Schapira, director del proyecto, asegura que la prioridad en ‘Iberian Highlands’ es la renaturalización del parque al mismo tiempo que se potencia el turismo ecológico, se impulsa el crecimiento socioeconómico de las localidades colindantes y se promueve la educación medio ambiental en los centros educativos.
Se trata de una iniciativa de gran envergadura que pretende abarcar acciones en distintos ámbitos en un periodo mínimo de veinte años. “Creemos que la única manera de conseguir un resultado visible es a largo plazo”, asegura el director del proyecto. El reto actual es identificar actuaciones importantes para la dirección del parque y para los municipios cercanos.
El turismo natural sostenible tiene un potencial “muy grande y podría realmente ser un motor económico”Las posibilidades del parque natural son “enormes”, puntualiza Schapira. “El potencial para atraer un turismo de la naturaleza que sea respetuoso en un ambiente que sea sostenible es muy grande y podría realmente ser un motor económico”, afirma.Ya han comenzado las primeras conversaciones para poner en marcha las primeras acciones, en concreto, en El Hosquillo. “Hemos empezado a asesorarlos para ver cómo se podría adecuar a lo que es el siglo XXI”, comenta. La idea es mejorar el bienestar de los animales del lugar, así como la experiencia turística. Estos diálogos comprenden una serie de intercambios en España y Francia para estudiar otras formas de gestión de los ríos para, posteriormente, crear un grupo de expertos que indiquen formas de producir cambios que desemboquen en una mejora.
Rewilding Spain, rama de la entidad europea afincada en España, ya tiene contactos con algunas empresas del sector procedentes de la UFIL. “Tienen ideas innovadoras de aprovechamiento y de negocios sobre la madera”. La idea es “dar valor” a este producto “que muchas veces se paga en el mercado muy bajo”. El plan para el futuro próximo es la construcción de “pequeñas reservas que puedan generar bienestar ecológico y, sobre todo, turístico”, apunta Schapira. Una vez empezado este trámite, el siguiente escalón es explorar de la mano del Gobierno y del parque natural la incorporación de elementos ausentes en el entorno. Un ejemplo es la falta del milano real o del buitre negro en algunas zonas y la posibilidad de estudiar su reintroducción. Esta propuesta, de tener luz verde, comenzaría a materializarse en el último trimestre del presente año o en 2024. Schapira hace hincapié en que esto último es, de momento, una posibilidad. “Son cosas que todavía tenemos que hablar con las autoridades. Por lo general, siempre que se hablan de reintroducciones de animales salvajes, son ellos quienes tienen que llevar la dirección de estos proyectos”, especifica.
Renaturalización
La meta principal es restaurar el medio natural de La Serranía de Cuenca. La intención es recuperar “esos procesos ecológicos que se han ido perdiendo con el tiempo, la mayoría de ellos por la acción humana”, explica Schapira. Hay múltiples caminos para lograr esta reparación y distintas problemáticas que atender como la drástica caída de ejemplares de algunas especies o la falta de grandes herbívoros, especialmente en la zona del Alto Tajo. El director del proyecto afirma que en Cuenca esta situación no está tan acentuada y que “todavía queda algo”. La importancia de estos animales en los montes es su colaboración desinteresada en la lucha contra los incendios. Las ganaderías extensivas limpian el monte y con ello reducen el riesgo de que se produzcan fuegos. La propuesta actual a los municipios del entorno es la introducción de ejemplares de caballos o tauros.
El parque natural presenta en algunas zonas escasez de grandes herbívoros y de especies carroñeras como, por ejemplo, el buitre negro“Creemos que todo esto tiene que traer un beneficio socioeconómico a la gente del territorio”, manifiesta Schapira. Hay, de momento, más de 11 contratos en algunas localidades en las que se lleva a cabo la iniciativa, a excepción de las de Cuenca, en las que se harán más adelante. “Son todos de aquí, de los pueblos. Trabajan, por ejemplo, cuidando a los animales o haciendo labores de mantenimiento”, aclara. Sin embargo, también hay quien ha venido desde otro lugar para asentarse en estos núcleos. Schapira es uno de esos casos.
La posibilidad de lograr un puesto es el motivo por el que cree que el proyecto puede ayudar a fijar población en una zona donde, en general, hay menos oportunidades de empleo. Este impulso tiene la capacidad de provocar el desarrollo del turismo natural en La Serranía y, con ello, dinamizar el territorio. “Ahora en la zona está poco expuesta. Hay algo de turismo micológico. Hay potencialmente una gran cantidad de actividades y de sitios que visitar”, comenta el director de ‘Iberian Highlands’. Otra de las áreas que aborda es la gestión forestal. “Creemos que en un contexto de emergencia climática es importante que esté encaminada a la captura de bosques”, señala Schapira. Se trata de destinar la madera mayoritariamente a la construcción “o a temas que permitan por lo menos capturar carbono”.
El proyecto pretende impulsar el crecimiento socioeconómico de los pueblos próximos a este entornoYa se han detectado las primeras carencias a combatir en La Serranía de Cuenca. Aun así, se trata de una visión genérica y las necesidades pueden variar de una zona concreta a otra. “La idea es analizar poco a poco cuáles son esos procesos ecológicos que faltan”, detalla. Este procedimiento se hace mano a mano con los municipios. “Va a llevar un tiempo identificar todas las acciones que se pudieran realizar”, asegura. El parque natural presenta en algunas zonas escasez de grandes herbívoros.
Faltan también otras especies, como, por ejemplo, carroñeros, que son imprescindibles para despejar a los animales muertos y evitar con ello la propagación de enfermedades. La ausencia de piezas en el puzle de un ecosistema hace que este esté incompleto, lo que deriva en una serie de problemas. Si los bosques se matorralizan, se vuelven “demasiado densos, lo que provoca grandes incendios y daños enormes”, señala Schapira. “Es importante ir reintroduciendo estos elementos para que esté equilibrado”, concluye. Otro de los grandes pilares es la gestión forestal. El objetivo es reconocer dentro de las masas arbóreas los bosques maduros para protegerlos y que sean aprovechados los de otros lugares. “Estamos hablando de montones de hectáreas. Son muy importantes a nivel ecológico”, explica.
La cuestión es mantener estas superficies y, para ello, Rewilding Spain va a conversar con las autoridades de las localidades. Si estos quieren aprovechar estas zonas forestales, desde la iniciativa se les compensará económicamente al no poder obtener beneficios. A cambio, se preservarán estos enclaves.
La Serranía de Cuenca ya ha emprendido una restauración que la convertirá en una tierra de esplendor.