Arranca proyecto de Erasmus Rural con 17 estudiantes de Cuenca
Esta semana 17 estudiantes de la Universidad de Castilla-la Mancha en Cuenca iniciarán un periodo de prácticas en instituciones, empresas y cooperativas en municipios de menos 5.000 habitantes de la provincia dentro del denominado Erasmus Rural, por el que además de facilitar la realización de prácticas pretende ser un elemento más de lucha contra la despoblación.
Así lo ha puesto de manifiesto el rector de la Universidad de Castilla-la Mancha, Julián Garde, en un encuentro con los medios de comunicación de Cuenca, en el que destacaba la buena acogida que, tanto por parte de los estudiantes como por las empresas e instituciones ha tenido esta primera edición, “especialmente en la provincia de Cuenca”, apuntaba.
Desde ingenieros agrícolas, a estudiantes de turismo, farmacia o arqueólogos, la demanda en esta primera experiencia piloto ha despertado el interés en numerosos sectores. De hecho, son más de 180 empresas e instituciones las que se han adherido al programa.
En el conjunto de la región se ha seleccionado a un total de 54 estudiantes, una cifra muy por debajo de las más de 300 solicitudes que ha recibido esta iniciativa que ha puesto en marcha el nuevo equipo de la UCLM.
Por ello, Garde espera que el próximo curso se pueda dotar de más financiación para “cumplir con las expectativas” que ha generado la puesta en marcha de esta iniciativa que durante tres meses permitirá a los estudiantes completar su formación en el medio rural con prácticas remuneradas, al tiempo que abre nuevas oportunidades de desarrollo en el medio rural, y con ello, frenar la despoblación.
El desarrollo de esta segunda fase del proyecto piloto, que cuenta con la financiación de las Diputaciones de Cuenca, Ciudad Real, Toledo y Albacete, se realizará en dos periodos. La primera comienza el 1 de julio y la segunda en octubre, con la vuelta a las aulas, puesto que entre las distintas especialidades formativas de los estudiantes que se han adherido al programa están los de la Facultad de Educación, que realizarán prácticas en la escuela rural con el inicio del nuevo curso.
Garde, avanzaba que la Universidad de Castilla-La Mancha se sumará al programa que, con características similares al Erasmus Rural, se pondrá en marcha a nivel nacional.
BALANCE DE GESTIÓN
El programa UCLM Rural es uno de los objetivos marcados en el programa de gobierno, del que Garde hacía balance tras haber cruzado el umbral de los primeros seis meses de su mandato al frente de la institución académica.
Un periodo lectivo que, según destacaba, ha estado condicionado por diversos factores como la borrasca Filomena, la cuarta ola de la pandemia, el ciberataque a la universidad, o su positivo en coronavirus que llevó al confinamiento de parte del equipo directivo. Aún así, estas circunstancias no han impedido que se cumplan los objetivos marcados.
Así, destacaba por ejemplo, que las relaciones que ha restablecido la Universidad con empresas, instituciones y administración, tanto el ámbito local y provincial como regional que, además de por su importancia para dar a conocer la labor que desarrolla la Universidad, ha permitido que se pongan en marcha dos cátedras.
Concretamente se trata de una cátedra sobre economía circular, y otra de cultura y desarrollo rural. La primera está financiada por la Consejería de Desarrollo Sostenible de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, y la segunda por Eurocaja Rural. Según señalaba Julián Garde, la previsión es que antes del verano una comisión mixta formada por representantes de la Universidad y las dos instituciones patrocinadoras realice la elección de los directores de ambas.
Del mismo modo, señalaba que se ha puesto en marcha la Comisión Ética en investigación de Ciencias Sociales “que era una necesidad que tenia la UCLM” y que y está funcionando ya con plena normalidad. Además se han convocado las Ofertas de Empleo Público para la renovación de las plantillas, una de ellas ya se ha publicado en el BOE y la otra “saldrá pronto”.
Junto a estas hay “muchas otras medidas que se han puesto en marcha, algunas de forma conjunta con el Gobierno regional, que a lo largo de este y los próximos años se irán concretando”.
En este sentido Garde señalaba que se está trabajando con la Junta para incrementar las ayudas especiales que la universidad destina a estudiantes más vulnerables , puesto que “una de las grandes preocupaciones que tenemos es que nadie se quede sin estudiar por motivos económicos”.
De otro lado, apuntaba que se está diseñando el nuevo convenio de financiación con el Gobierno regional, que tendrá vigencia de cinco años en lugar de cuatro, con el fin de que la negociación del próximo no coincida con el proceso electoral de la universidad, y de esa forma evitar que se paralice.