Diez años después del 11M
Diez años después, dirigentes del PP como el presiente de la Comunidad de Madrid o nada más y nada menos, la secretaria general del PP y presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, siguen queriendo poner en tela de juicio y crear una nebulosa sobre lo ocurrido el fatídico 11-M.
Ya hubo una sentencia que, como en este caso, cuando no le gusta al PP, la discute, la deja en entredicho y le da vueltas para intentar desprestigiar a las instituciones o personas que no dicen lo que ellos quieren oír. Y así, el juez Bermúdez fue casi linchado, algo que sí han conseguido con Garzón y Elpidio Silva.
Los dirigentes del PP tuvieron como cómplices de ese intento de linchamiento a la caverna mediática, con P.J. Rámirez de máximo ariete. Su idea era clara, ETA tenía que estar detrás de este terrible suceso y no los yihadistas, capaces de ejecutar su venganza por la participación de España en la Guerra de Irak.
Y ahora, diez años después de aquel triste y lamentable día, Cospedal hace declaraciones tales como.” ….al margen de la sentencia, toda luz que se pueda arrojar será bienvenida”, “…cuantos más datos y más cosas mejor, será bienvenido por el PP”, o “…trabajar para que no se produzcan más actos terroristas ni se repita una masacre como aquella”.
Y uno se queda casi perplejo y digo casi porque Cospedal ya no deja de sorprendernos, pues olvida qué puesto político ocupaba ella por aquel entonces, nada más y nada menos que la número 3 del Ministerio del Interior, Cospedal era el 11 de marzo de 2004 la subsecretaria del Ministerio del Interior que “dirigía Ángel Acebes, por lo que Cospedal tuvo toda la información de primera mano y aún así no solo entonces (como hizo todo el gobierno del Sr. Aznar queriendo implicar a ETA), sino que también ahora, Cospedal deja caer, como el que no quiere la cosa, que el caso no está cerrado.
Como subsecretaria del Ministerio del Interior, Cospedal tenía obligaciones, como la que dice ahora de “….trabajar porque no se produzcan más actos terroristas”, pero en fin, aquí, en estos asuntos, también nos diferenciamos los unos de los otros y la culpa de toda esa masacre no fue ni de Aznar ni del PP por meternos en una guerra ilegal e injusta, fue de unos locos que cegados por el odio truncaran la vida de 192 personas, de sus familias y de 1.800 víctimas más.