Caos en septiembre
Las previsiones meteorológicas ya lo avisaban: una fuerte DANA iba a atravesar la provincia de Cuenca el pasado fin de semana e iba a dejar lluvias muy intentas sobre el territorio conquense. Como siempre suele ocurrir, por muchos avisos que uno reciba, nunca se está preparado al 100% para ver como la naturaleza es capaz de destrozar vidas y llevarse por delante todo aquello que durante tantos años hemos construido con nuestras propias manos.
Es lo que ha pasado en varias localidades del sur de la provincia de Cuenca al paso de esta DANA: más de 300 litros por metro cuadrado y hasta 188 incidencias es lo que ha dejado el temporal a su paso por el territorio, donde la peor parte, sin lugar a dudas, se la ha llevado Buenache de Alarcón, auténtica zona cero del temporal, pero que también ha causado inundaciones e incidencias en otros puntos de la tierra conquense como Belmonte o Motilla del Palancar.
Estas fuertes lluvias no hacen sino poner de manifiesto la necesidad de tomar conciencia con el cambio climático: por mucho que haya negacioncitas y partidos a la derecha del PP que se empeñen en decir que todo esto es una invención, solo hay que ver los testimonios y fotografías de las primeras páginas de este periódico para ver que no es así. El cambio climático existe y la naturaleza puede destrozarnos la vida en apenas unos minutos. De no llover durante 4 meses hemos pasado a registrar más de 300 litros por metro cuadrado en unos días, algo que da que pensar.
La DANA ha puesto de manifiesto la necesidad de que todos tomemos medidas contra el cambio climático ya que cada gesto cuenta, al mismo tiempo que los pueblos tienen que acomodar sus infraestructuras a la realidad que estamos viviendo. Los ríos, por muy secos que los veamos ahora, están ahí porque en algún momento hubo agua y si cada vez van a ir a más estas DANAs, no queda más que acometer obras para rehabilitar cauces y dejarlos más limpios.
También hay que incidir en obras de contención. Un ejemplo de falta de medidas se ha visto en Las Pedroñeras, donde las aguas que bajaban de distintos puntos de la comarca provocaron inundaciones.
Y aunque se repitiesen, tenemos que tener la tranquilidad de que estamos en muy buenas manos: efectivos del Plan Infocam, Bomberos, Protección Civil, Policía Local y Nacional están haciendo un trabajo de matrícula de honor estos días. También es importante valorar la solidaridad que siempre sale hasta de debajo de las piedras.
El campo, por desgracia, también se ha visto perjudicado. Uno de los cultivos que se iba a empezar a recoger ahora, como la almendra, se ha visto seriamente dañando. Una lástima porque la campaña más o menos se iba a salvar aunque el calibre era pequeño, pero ahora tras el temporal se estiman pérdidas entre el 20 y el 90 por ciento.
A pesar de la cancelación de varias fiestas patronales como consecuencia del temporal, los ávidos de fiesta tienen la opción de pasarlo bien estos próximos días en Tarancón y Chillarón.
