25N en Castilla-La Mancha
El 25 de noviembre es el día internacional de la eliminación de la violencia contra las mujeres. El año pasado, más de 51.000 mujeres y niñas fueron asesinadas, es decir, una cada 10 minutos. En España, en 2023 el número de mujeres ascendió a 55, y en lo que va de año, 40 mujeres han sido víctimas mortales de la violencia de género. En total, desde que empezaron a contabilizarse las víctimas en nuestro país en el año 2003, el número asciende a 1.285 mujeres. En Castilla La Mancha, desde 2003, han sido 59 asesinadas, 3 de ellas este último año.
Sin embargo, ante estos datos alarmantes que muestran que la violencia contra las mujeres es una realidad, la voz y la lucha de las mujeres ha intentado ser silenciada constantemente. Aún así, surgen fenómenos como el #MeToo, el #Cuéntalo o, más recientemente el #SeAcabó, donde salen a la luz testimonios respecto a la violencia sexual, que revelan la importacia del feminismo y la sororidad entre las mujeres. Con estos testimonios, pese a la conmoción que causan, se evidencia que esta violencia queda impune en todos los ámbitos, incluso en una organización de izquierdas. Por no hablar de los cuestionamientos, que no son otra cosa que otra forma más de violencia, que responsabilizan a las mujeres con preguntas como “¿qué llevabas puesto?” o “¿cuánto habías bebido?”. De ninguna manera la culpa o la vergüenza debe ser de la víctima, no existe justificación alguna para sufrir una violencia de este tipo, el máximo culpable es el agresor, y en él es donde se debe poner el foco. Como dijo Giséle Pelicot, víctima de violación masiva, “la vergüenza debe cambiar de bando”.
Desde Podemos, hemos contribuido legislativamente a luchar contra la violencia machista, reivindicando que el acceso a derechos y recursos por parte de las mujeres no puede estar supeditado a una denuncia, o que el consentimiento de las mujeres sea el elemento central para la garantía de la libertad sexual. No obstante, esta Ley de Libertad Sexual impulsada por el Ministerio de Igualdad de Irene Montero ha sufrido una guerra por parte del Estado, no sólo para atacar a la formación política que la impulsó, sino también debido al miedo patriarcal a que existan avances en los derechos de las mujeres que haga tambalear su sistema, el machismo. Es por esto que, poco después de la aprobación de la ley, el PSOE llegó a un acuerdo con el PP para eliminar el consentimiento del centro del Código Penal. También es por esto que se ha publicitado falsamente que esta ley era un retroceso para las mujeres porque se rebajarían las penas de los agresores por culpa de la ahora ex-Ministra, cuando realmente esto no es así: los fiscales debían aplicar el derecho transitorio vigente, por el que las penas no pueden ser rebajadas de forma automática y que no se modifican las pena cuando la ya impuesta queda englobada en el marco de penas posterior, independientemente de la retroactividad de la ley penal favorable. Pero algunos jueces decidieron rebajar las penas. Y la culpa fue, según ellos de Irene Montero para lo que hubo toda una campaña de lawfare y mediafare, en lugar de señalar a los reales responsables que decidieron que era más importante el desgaste a un partido político de lo que lo son las mujeres. Porque la defensa de nuestros derechos y la erradicación de la violencia contra las mujeres nunca es lo primero para una sociedad patriarcal pero sí para la sociedad feminista, la mayoría.
Por otra parte, la derecha y ultraderecha continúan negando esta violencia. En Toledo, capital de la comunidad castellano-manchega, gobernada por PP y VOX, se ha eliminado la manifestación del Consejo Local de la Mujer, tras su realización durante 30 años, aunque se mantendrá la convocada por la Plataforma 8M. El argumento utilizado ha sido el de unas obras en una parte del recorrido de la marcha, algo no muy convincente después de que eliminaran nada más llegar al gobierno la Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento, o de que prohibieran la exhibición de la bandera LGTBI en un pleno municipal y se exigiera a la Policía Local que la retirara. Esto no sorprende al venir de partidos que tienen cargos que afirman que su acto más romántico es recogerle la ropa a su esposa, o que los únicos méritos de una mujer son estudiar en profundidad a su pareja.
El movimiento feminista seguiremos luchando contra la violencia contra las mujeres en todas sus formas, y para sacar al patriarcado de las instituciones y de la sociedad. Como parte de esta lucha, hoy, lunes 25 de noviembre, todas las personas feministas marchamos para reivindicar el fin de esta violencia. En Castilla La Mancha, las principales marchas serán las siguientes:
Albacete: Plaza 25N (C/ Ramón Gómez Redondo con C/ Paz), 19:00.
Cuenca: C/ Carretería (cruce Sánchez Vera), 19:00.
Ciudad Real: Plaza Mayor, 20:00.
Talavera de la Reina: Plaza de San Francisco, 20:00.
Toledo: La Vega, 18:00.
Guadalajara: Templete del Parque de la Concordia, 18:30.