“En el mundo de la discapacidad todavía hay mucho por hacer aunque se ha avanzado”
Si hay una taranconera que puede presumir de haber dedicado 22 años de su vida al mundo de la discapacidad ella es María Dolores Ruiz Zarceño, quien como reconoce, en todo este tiempo ella ha dado “un granito de arena y se le ha devuelto una gran montaña”.
En un primer momento, la taranconera empezó a colaborar hace algo más de dos décadas con Afamit, la Asociación de Familiares de Personas con Discapacidad Intelectual de Tarancón, en donde con el paso del tiempo llegó a ser su presidenta, cargo que ocupó durante dos años.
A raíz de esta presidencia, a Ruiz Zarceño le llegó la oportunidad de acudir a las reuniones de la federación castellano manchega de la Confederación Española de Organizaciones en favor de las Personas con Discapacidad Intelectual, en donde formó parte del equipo guía para hacer el manual de buenas prácticas.
De ahí, dio el paso a la Fundación Tutelar de Castilla-La Mancha, y a través de ellos conoció a la Federación de Deportes para Personas con Discapacidad Intelectual de Castilla La Mancha, en donde entró a formar parte como vocal, para ser luego su vicepresidenta y al final la secretaria.
Una trayectoria de 22 años en el mundo de la discapacidad en lo que la protagonista se queda “con que todavía hay mucho que hacer, aunque se ha avanzado mucho en los últimos tiempos, pero hay que seguir luchando”.
Una lucha que el mundo de la discapacidad deberá continuar sin ella, porque debido a problemas personales, no puede seguir colaborando con ninguna asociación, “pero hay que seguir manteniendo la lucha”, pide.
Cuando recibió la llamada de la consejería de Bienestar Social para comunicarle que ella iba a ser una de las reconocidas en los Reconocimientos a la Iniciativa Social de Castilla-La Mancha, sintió “mucha alegría y entusiasmo, porque es un reconocimiento muy importante”, al mismo tiempo que no podía entender cómo le había llegado a ella.
“Si antes me maravillaba la capacidad de una persona por superar las barreras que cada día tenemos en nuestra vida, ellos cada día te enseñan una cosa nueva”, subraya Ruiz Zarceño, quien se guarda para ella “mucha satisfacción” por haber trabajado durante dos décadas con personas discapacitadas.
