“Es fundamental un plan que impulse la vivienda protegida”
Rafael Cortés Contreras (Cuenca, 1967) acaba de asumir las riendas de la Asociación Provincial de Empresas de la Construcción y Afines (Apymec), que aglutina a 120 negocios conquenses de diferentes tamaños. El nuevo responsable, licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales y con dos máster relacionados con la gestión empresarial y equipos de trabajo, habla sobre los retos del sector, afectado por la falta de mano de obra y el incremento generalizado de los precios.
¿Cómo afronta el nuevo reto?
Si aceptas un cargo tienes que asumirlo con responsabilidad y también con ilusión por intentar ayudar a las empresas del sector. Las asociaciones están para eso, para defender los intereses de sus miembros e intentar que se adopten las medidas oportunas para que la actividad se desarrolle con la mayor normalidad.
¿Cuáles son las líneas de acción?
Lo más importante es el día a día. Tenemos que estar siempre actualizados y prestar el servicio que todos y cada uno de nuestros socios necesitan. En este sentido, tenemos el apoyo de CEOE Cepyme Cuenca, que a través de sus técnicos nos informa y nos asesora. Luego Apymec es el interlocutor válido con las administraciones de cara a solventar las cuestiones que vayan surgiendo, para que tengamos una actividad lo más normalizada posible, evitando los obstáculos que puedan surgir.
¿Cuál es la situación del sector?
El sector de la construcción ha sido sin duda uno de los que más ha sufrido con todo lo que tiene que ver con la subida de precios y la inflación. Por ejemplo, todos los materiales que estudia el INE relacionados con la construcción incrementaron su coste de manera desproporcionada desde enero de 2021 hasta junio de 2022, y todavía el sector está pagando estos efectos. Así, el índice de precios de materiales de construcción del INE señalaba que la energía ha incrementado su precio casi un 90% (87,68%), pero también lo hicieron los materiales bituminosos que se aplican a los pavimentos en un 81,35%; el aluminio, en un 68%, o los materiales siderúrgicos, en un 67%. De hecho, todos los materiales que incluye este índice crecieron su precio de manera considerable. A todo esto tenemos que añadir que los costes de financiación también se han incrementado por el aumento de los tipos de interés y por este motivo se complica la situación de las empresas, que tienen más dificultades para poner en marcha sus proyectos por la caída de la demanda.
"Tenemos que ser ambiciosos y apostar por la vivienda nueva, por planes para jóvenes porque está demostrado que las nuevas promociones dan un mayor impulso a la economía y al empleo”
¿Qué demandas hace el sector?
Es fundamental que encontremos una estabilidad de precios y que volvamos a contar con el apoyo de las administraciones para la realización de acciones que redunden en beneficio de toda la sociedad. Por ejemplo, es fundamental contar con un Plan de Vivienda que recupere en mayor medida el protagonismo de la protegida y que cuide a personas como los jóvenes que tienen muchas dificultades para acceder a una primera casa. Urge un plan específico para ellos y en cuanto a la obra pública, es necesario que se recuperen unas inversiones fundamentales para vertebrar territorios y que se han paralizado en los últimos tiempos, algo que, sin duda, luego costará más caro porque estas infraestructuras están sometidas a un desgaste. Además, tenemos que lograr entre todos que el sector de la construcción solvente el problema que tiene para conseguir mano de obra. Es fundamental que las empresas encuentren personal para que puedan crecer y cumplir con los tiempos establecidos o poder afrontar licitaciones. También es importante una mayor rapidez por parte de las Administraciones en la tramitación de permisos y licencias para que la burocracia no paralice la actividad.
En obra pública, se están quedando licitaciones desiertas...
Se debe a una serie de factores. Como hemos dicho, falta mano de obra; las empresas tienen un número de trabajadores y no pueden asumir de un día para otro determinados proyectos, o no pueden contratar si luego no van a quedarse estas concesiones. Y si a eso le añadimos el incremento del precio de los materiales, hace que sea inviable afrontar ciertas obras porque no son rentables. En este sentido, se puso en marcha un mecanismo excepcional de revisión del precio de los materiales, pero este decreto no ha tenido en cuenta el incremento de la energía y además, según la Confederación Nacional de Construcción, muchas entidades locales no se han adherido a este decreto al ser obras de menor importe y esto perjudica a los constructores que no pueden asumir estos proyectos.
¿Y en el sector privado?
Existe mucho movimiento en lo relativo a la rehabilitación pero tenemos que ser ambiciosos y apostar por la vivienda nueva, por planes para jóvenes porque está demostrado que las nuevas promociones potencian muchos más subsectores y dan un mayor impulso a la economía y al empleo.
¿Cuáles son los retos de futuro?
Nuestro reto es prestar el mejor servicio diario y luego intentar crecer. Porque el sentido de la asociación es incorporar más empresas. Estamos para defender sus intereses y que estas empresas, con nuestra ayuda, sean cada vez más fuertes y consolidadas.