“Este espectáculo en directo va más allá de lo que el espectador tiene en la cabeza”
Con tan solo cinco años se adentró en el mundo de la gimnasia, y con el paso del tiempo, logró forjar su carrera en este ámbito. Después de 16 años en la alta competición, con resultados como el campeonato de España, decidió dedicarse a algo que siempre le había gustado, “ser payaso”. En 2010 creó su primer espectáculo ‘Mono A Mono B’, al que siguió en 2017 ‘Piensa en Wilbur’. Durante todo este tiempo ha compaginado el teatro con el cine y la televisión, ganando fama como miembro del renovado Grand Prix del Verano en TVE desde 2023. Ahora llega a Cuenca con un espectáculo que, asegura, “no va a dejar a nadie indiferente”.
¿Qué se va a encontrar el espectador?
Humor, acrobacias, baile, música… Este es un espectáculo multidisciplinar que abarca muchos aspectos dirigidos por un personaje que es Wilbur. Todo ello con una duración aproximada de 90 minutos, aunque depende de cómo se desarrolle todo el show.
¿Qué intención se persigue? ¿Dejar al público anonadado?
Exacto, eso es lo que intentamos con el espectáculo y casi siempre sale. Esa combinación de acrobacia con humor es lo que marca la diferencia. Yo hago las cosas que se me dan bien, y como fui gimnasta profesional, hay mucho cuerpo, mucho físico y mucha postura corporal. Luego también hay mucha improvisación, porque me encanta jugar con los más jóvenes que van a verme. Al final es un batiburrillo de muchas disciplinas a lo largo de una hora y media.
¿Te gusta interactuar con el público?
Sí. Me encanta bajar al patio de butacas y me gusta jugar con los niños, y con los no tanto. Me divierte muchísimo, porque así entra en juego lo espontáneo, y eso siempre es bueno.
¿Qué le dice la gente?
Siempre se va contenta, y como me dicen, este tipo de espectáculos en directo siempre es mucho mejor que verme por televisión o en redes sociales. Mucha gente viene porque me conoce del concurso El Grand Prix de Televisión Española, otros porque me siguen en redes. Al final, este espectáculo va más allá de lo que el espectador puede tener en la cabeza, y ver al personaje de Wilbur en un show en directo siempre es mejor. Hay gente que se sorprende, pero les acaba gustando porque aquí puedo profundizar más en el personaje.
Este espectáculo ha sido premiado en diferentes festivales de teatro de calle…
Algunos premios hay por ahí sí, pero el mejor de todos es que sigan las actuaciones y que Wilbur se suba a un teatro delante de la gente. Ese es el premio.
‘Piensa en Wilbur’ lo creaste en 2017. ¿Te imaginabas el recorrido que has tenido en estos años?
No, aunque es cierto que pienso de poco en poco, a pocos meses vista. Ha tenido muy buena acogida, y esperaba hacer muchas menos actuaciones de las que lleva. Es de pequeño formato, fácil de mover, y a la gente le está gustando mucho. Además, yo encantado de hacerlo porque me divierto mucho.
“Mucha gente sale encantada del show porque no se esperan ver todo lo que hay sobre el escenario”
Mucha gente te ha conocido a raíz del Grand Prix de TVE. ¿Te ha abierto este programa a un nuevo público?
Sí claro. Yo pensaba que cada vez la televisión era vista por menos gente, pero resulta que no. Desde que dejé la gimnasia profesional para dedicarme al espectáculo siempre he estado enfocado a todos los públicos y que este fuera familiar, y a raíz del concurso estoy viendo que vienen más familias, cosa que me encanta porque es lo que siempre yo he hecho. Hubo una época en mi vida que presentaba cabarets en Madrid y el 80% de mi público era adulto, pero ahora estoy viendo más familias. Y eso me encanta porque yo abarco todos los públicos.
¿Este público más familiar ahora te sirve para hacer un espectáculo más variado?
Sí, al final, al trabajar para todos los públicos abarcas más campo. Me gusta mucho improvisar con los niños, porque el público adulto resulta demasiado previsible. El niño tiene una frescura que no me la espero nunca, y me mola sorprenderme. Estoy muy feliz y contento, porque siempre he trabajado así y me encanta ver familias en el teatro.
Durante unos meses formaste parte del Circo del Sol. ¿Prefieres antes el pequeño formato que la compañía?
Fue una experiencia brutal estar con El Circo del Sol, pero era demasiado grande, mucha parafernalia. Yo soy más underground, de hacer las cosas solito, con mi compañía, donde tengo absoluta libertad creativa. Es formidable y fantástico lo que hace esa compañía, pero siempre me ha gustado más el tú a tú.
¿Continuarás mezclando gimnasia y humor en un futuro?
Sí, el sello Wilbur va a estar ahí, además me hace gracia imaginarme dentro de diez o quince años calvo y haciendo mis paranoias. Voy a aguantar hasta que el cuerpo dure, y estoy en forma. A parte de este show tengo otro que se llama Fuego Salvaje, con el que espero ir a Cuenca de nuevo, y ya estoy escribiendo y montando el próximo. Hay Wilbur para rato.
¿Qué mensaje lanzas al público conquense?
Que vengan, que se dejen sorprender, porque ir al teatro siempre es buena opción y mucho mejor disfrutar de la cultura en directo antes que por las pantallas. Es un espectáculo para todos los públicos, por lo que pueden venir las familias y disfrutar juntos de un planazo. El público que viene me quiere mucho, se lo pasan genial. Como me han comentado muchas veces, ellos no se esperan lo que ven, por lo que salen más que encantados.