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“Esta Semana Santa va a ser una explosión de emociones”

Jorge Saiz Moratalla, joven cofrade de la hermandad de San Juan, será el pregonero de la Semana de Pasión de Tarancón
Jorge Saiz Moratalla. Foto cedida
12/03/2022 - D.C.

Le corre Semana Santa por las venas desde que era pequeño. Ahora, a sus 26 años, Jorge Saiz Moratalla, cofrade de San Juan Evangelista, ha sido elegido por la Junta de Hermandades de Tarancón para dar el pregón. La cita será el sábado 9 de abril en torno a las 21:00 horas en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción. Como graduado en Historia del Arte, promete un discurso “dinámico” lleno de sentimiento que haga también un recorrido por los pasos procesionales del municipio.

 

Enhorabuena. ¿Qué significa este nombramiento?

Significa mucho. No me lo esperaba. Y, en todo caso, lo hubiese pensado para dentro de muchísimos años porque no suele ser habitual elegir a personas jóvenes. Normalmente suele darlo gente con más trayectoria. Cuando me lo propusieron, dije: ‘Qué honor y qué responsabilidad’. Pero lo acepté con gusto.    

 

Y después de dos años sin Semana Santa, imagino que este año será mucho más especial.

Sí, la gente tiene muchas ganas de Semana Santa. Quien sea cofrade, de portar los pasos y tocar en las bandas, y quien sea devoto, de verla desde fuera. En octubre tuve la oportunidad de tocar en Málaga en una procesión magna que hubo con motivo del centenario de la Agrupación de Cofradías y ya se notaba ese ambiente. Cuando llegue la Semana Santa de este año, va a ser una explosión de emociones.       

 

¿Cómo nació su devoción por la Semana Santa?

Desde pequeño me ha gustado la Semana Santa en general, sobre todo la andaluza, y de nuestra tierra, las de Tarancón y Cuenca. En mi familia no había tradición semanasantera ni pertenecían a ninguna hermandad. Pero yo de pequeño, como vivía al lado de la iglesia, solía bajar a ayudar a adornar los pasos. Y a los ocho años quise pertenecer a una hermandad. Me gustaban la de San Juan y la de la Virgen de la Soledad, que eran en las que ayudaba. Al final me decidí por la de San Juan y fui con mis padres a apuntarme. Después también se animaron mi hermana y mis padres pero yo fui el primero que quiso vincularse para tocar algún día en la banda y, para cuando me diese la altura, sacar algún paso. Sí es verdad que a mi madre también le gusta mucho la Semana Santa pero no se había llegado a vincular.

Cuando ya me apunté yo, seguí bajando la mañana de Jueves Santo a la iglesia a ayudar cuando se preparaban los pasos. Luego empecé en la banda de cornetas y tambores de la hermandad. Después me he ido implicando en otras partes de la Semana Santa como la Pasión Viviente, donde interpreto al apostol San Felipe.

Y desde el punto de vista parroquial, soy el organista de la iglesia de San Víctor y Santa Corona y he sido catequista. También soy monitor del grupo Manos Abiertas Olimpiada de la Paz. Todo esto hace que en el ámbito parroquial esté todo el año. Y también participo en Semana Santa en los oficios del Domingo de Ramos y el Triduo Pascual de Jueves Santo y Viernes Santo y la Vigilía Pascual del sábado. Y hace tres años entré en la banda de música con la flauta travesera aunque no me dio tiempo a estrenarme mucho porque en la última Semana Santa llovió y solo pude salir el Domingo de Resurrección. Así que he visto la Semana Santa desde muchos puntos de vista, como espectador y luego desde dentro.

 

“La Semana Santa de Tarancón ha experimentado un gran cambio. Las hermandades se han preocupado por dar uniformidad y vistosidad a la celebración. Estoy muy orgulloso”

¿Cuáles son los recuerdos más especiales que tiene?

Uno sería un recuerdo con el que he crecido: bajar la mañana de Jueves Santo a ayudar a preparar los pasos. En el caso de la Virgen de la Soledad, se le colocaba un manto de claveles blancos y yo iba porque siempre hacía falta gente. Y si no, a montar el palio. Y en la hermandad de San Juan, a mover las imágenes o a lo que fuera. Ese sería uno de los recuerdos más especiales.

Y dentro de la Semana Santa, la procesión de Jueves Santo. Aparte de porque sale mi titular, San Juan, la bajada del Caño, el aplauso que da la gente a los pasos cuando llegan abajo y la parte del encuentro, con el canto del Miserere, son de lo más especial para mí de la Semana Santa.   

 

¿Cómo será el pregón?

Quiero que sea dinámico, algo más que una charla. Quiero combinar la parte cofrade pura de sentimiento, que es la que llevo viviendo desde pequeño; la parte de la fe y lo que representa la Semana Santa para los cristianos; y, como docente que soy, hablar también de historia del arte, que es mi especialidad, a través de los distintos pasos procesionales que hay en Tarancón. Y con esos tres elementos, crear un discurso que sea dinámico y en el que yo transmita a la gente lo que para mí supone la Semana Santa pero que al final cada uno lo haga propio y se acuerde de cómo ha vivido esta celebración.

 

¿Cómo es la Semana Santa de Tarancón?

La Semana Santa de Tarancón ha experimentado un gran cambio, sobre todo desde que se declaró de Interés Turístico Regional en 2010. Las hermandades se han preocupado muchísimo por dar uniformidad y vistosidad a la celebración. Somos el segundo municipio más grande de la provincia de Cuenca pero la Semana Santa era antes casi de pueblo pequeño. La Junta de Cofradías ha hecho un gran trabajo por unificar todo y darle solemnidad a los desfiles y hacer propuestas no solo dentro de la Semana Santa sino también fuera. Porque pertenecer a una cofradía no es prepararse un mes antes y sacar el paso en Semana Santa y ya está; es compartir con tus cofrades durante todo el año. Me siento orgulloso del crecimiento que ha experimentado en estos últimos años. Invito a la gente a que venga al pregón y espero que sirva para que comprendan lo que es la Semana Santa como momento culmen del año cristiano. Después de dos años sin celebrarla, se va a vivir con ganas.